Jeff Bezos, a punto de llegar al espacio: dónde y cuándo ver el despegue de la New Shepard

De momento, el siguiente capítulo lo escribe Blue Origin en unas pocas horas. Y, tal y como han confirmado fuentes de la compañía, todo va según lo previsto. «Hemos analizado todos los sistemas del vehículo, incluido el hardware, el software, los procedimientos y la preparación de la tripulación de lanzamiento. Actualmente no existe ningún problema y la New Shepard está lista para volar», confirmó en rueda de prensa el lunes Steve Lanius , director de vuelo principal de Blue Origin. También parece que el clima respetará la hazaña de Bezos, aunque hay informes de pequeñas probabilidades de lluvia y tormentas eléctricas que podrían retrasar el lanzamiento.

La nave New Shepard, una sonda que incluye cápsula y cohete en un 'todo en uno', es totalmente reutilizable y ha sido diseñada tanto para transportar personas como cargas útiles –por ejemplo, pequeños satélites–. Hasta el momento, han despegado en las pruebas cuatro naves New Shepard, realizando un total de 15 vuelos de prueba suborbitales. El de este martes será el primero en llevar tripulación.

En concreto, estará formada por el propio Bezos, fundador de Blue Origin en el año 2000; su hermano Mark; la veterana piloto Wally Funk , de 82 años y que se quedó fuera del programa espacial estadounidense por cuestiones de género en los años sesenta; y el joven Oliver Daemen , el estudiante holandés de 18 años al que su padre le ha comprado el billete por una cifra que aún no ha trascendido. Esta tripulación batirá dos récords: la persona de más edad enviada al espacio y la persona más joven. Todos ellos han pasado por clases de instrucción, prácticas en la cápsula y ensayos de misión, así como un examen final, si bien nadie estará a los mandos de la cápsula, que se tripula de forma autónoma.

«La gente sigue preguntando si estoy nervioso. No estoy realmente nervioso, lo que estoy es emocionado. Tengo curiosidad. Quiero saber qué vamos a aprender», explicó el propio Bezos para la CBS. «Hemos estado entrenando y la nave está lista, igual que el equipo, que ha hecho un trabajo increíble. Nos sentimos realmente bien».

Bezos quiere hacernos olvidar el vuelo de Richard Branson , quien se elevó a 88 kilómetros con su avión espacial Unity y se convirtió en el primero de los millonarios con su propia nave en 'acariciar las estrellas'. Para ello, ha planeado un vuelo de una duración similar al de Virgin, si bien su planteamiento es más parecido a las misiones espaciales 'al uso': la cápsula se desprenderá del cohete y alcanzará los 106 kilómetros de altura, pasando el límite de la ahora famosa línea de Kármán , la frontera que, según la Federación Aeronáutica Internacional, marca el inicio del espacio. El vuelo completo dura unos 11 minutos, aunque la tripulación solo experimentará tres de ingravidez. Después, el cohete regresará de forma autónoma a la plataforma de lanzamiento, mientras que la cápsula se posará frenada por un enorme paracaídas.

Y todo será retransmitido en directo a través de la página de la compañía y sus redes sociales [También puede seguir la retransmisión a través de ABC.es].

La cápsula tiene una capacidad máxima de seis personas e incluye grandes ventanas para que los astronautas disfruten de las vistas de la Tierra. Una vez que la ruta esté en marcha, los vuelos también incluirán experimentos científicos ( como el del ingeniero granadino Álvaro Romero ), una oportunidad para que los investigadores prueben su tecnología en condiciones de microgravedad.

Tanto Virgin Galactic como Blue Origin aún se encuentran en vuelos de pruebas, pero ya perfilan el negocio. La compañía de Branson podría comenzar las operaciones comerciales completas a principios del próximo año, si bien aún quedan algunos vuelos de prueba este próximo otoño. Por su parte, Blue Origin ya tendrá a bordo de su vuelo inaugural a su primer cliente, pero planea abrir la venta de asientos en septiembre u octubre de este mismo año. «Tenemos la intención de tener dos vuelos más este año, en 2021, para un total de tres vuelos tripulados, y muchos más en el futuro», explicó en rueda de prensa Ariane Cornell , directora de ventas de astronautas de Blue Origin. «Ya tenemos una sólida cartera de clientes que están interesados».

El último precio de venta de Virgin Galactic era de 250.000 dólares , si bien la compra de billetes está suspendida desde 2014, después de la prueba fallida en la que murió el piloto que tripulaba el avión espacial. Por su parte, Blue Origin planea desvelar sus tarifas después del vuelo de Bezos, aunque el primer asiento fue vendido a un millonario anónimo que pagó 28 millones de dólares pero que, por problemas de agenda, no podrá estar en el viaje inaugural (Oliver Daemen será quien ocupe su puesto).