Barcelona, el gran plató de Europa
La capital catalana se convierte en la ciudad europea más filmada con 2.494 rodajes, un 16% más que el año anterior
Una mañana cualquiera, si a uno se le antoja dejarse caer por el cruce de las calles Aribau y Travesara de Gracia con ganas de cafeína, es bastante probable que en vez de con un taza de café humeante acabemos tropezando con un montón de cables, focos, personal equipado con radios cortando el paso y, cómo no, un sinfín de vallas estampadas con el lema «Espacio reservado para filmación».
Es más: en un buen día incluso podemos descubrir un caballo avanzando al trote por la calle Aribau -animal que, más tarde, reparecerá ver en la pequeña pantalla como actor secundario de un flamante anuncio de coches- o, mejor aún, descubrir a través del cristal a la mismísima Claudia Schiffer grabando un spot en el interior del local, como ocurrió a finales del mes pasado.
La esquina en cuestión, ocupada por una cafetería-hamburguesería que, cuando no acoge un rodaje, pasa por ser uno de los locales de moda del barrio de Sant Gervasi, se ha acabado por convertir en uno de los mejores indicadores de la salud de Barcelona como plató cinematográfico y audiovisual.
Una ciudad que, pese a la crisis, sigue sumando puntos como destino favorito a la hora de acoger rodajes de largometrajes, documentales y spots publicitarios. Así lo constata el Ayuntamiento en un informe que cifra en 2.494 el número de rodajes que atrajo la ciudad en 2013, un 16% más que la temporada anterior, y que sitúa a Barcelona como la ciudad europea más filmada.
«Podemos considerar que, hoy por hoy, Barcelona es una ciudad libre en Europa en rodajes», celebra el teniente de alcalde de Cultura, Jaume Ciurana, para subrayar unos datos que sitúan a la capital catalana por encima de París y Londres en número de rodajes. En los últimos meses, por ejemplo, se ha podido ver deambulado por la ciudad a los equipos de grabación de «Los últimos dias», «Barcelona nit d’estiu» o, más recientemente, «The Gunman» (encontronazo taurino con el Ayuntamiento incluido) o la última entrega de la saga «Rec».
El eco internacional de películas como «El perfume», «Todo sobre mi madre», «Una casa de locos» y, sobre todo, «Vicky Cristina Barcelona» y el hecho de que, tal y como subraya el consisitorio, Barcelona sea la única ciudad catalana que no cobra tasas de ocupación por las filmaciones de carácter culltural, ha disparado el interés por la ciudad como escenario.
Los datos, sin embargo, tienen truco: crece el número de rodajes, sí, pero no todos por igual. Así, mientras que el número de rodajes publicitarios se dispara, sumando 1.203 entre spots, reportajes publicitarios y grabaciones corporativas, el número de película , sumando telefilms, se queda en 40.
Una cifra que queda por debajo de las 153 películas que se rodaron en Londres en 2013 y las 130 que escogieron París pero confirma a Barcelona como inmejorable plató publicitario. De hecho, frente a los 374 spots que se rodaron en Londres, Barcelona acogió un total de 982, unos datos que arrojan curiosidades como que las productoras japonesas, las que encabezan el ránking internacional con 40 grabaciones en 2014, escogen para sus grabaciones mercados como los de la Boquería, Encants antics y Santa Caterina; o que los espacios más solicitados para filmar son el Museo de Historia de Barcelona, la antigua fábrica de Fabra i Coats, el Born Centre Cultural y el Museo Picasso.
Datos todos ellos para el optimismo de la industria audiovisual que, sin embargo, contrastan con ese otro informe que hizo público FACUA y que desveló que Barcelona, con un precio medio 9,11 euros, es la ciudad española más cara a la hora de ir al cine .
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