Cómo distinguir si una piel es seca, mixta o grasa

Sin embargo, es importante conocer cuál es nuestro tipo de piel , porque no es lo mismo aplicar constantemente cremas a una piel que no las necesita diariamente que no hidratar aquella que aparentemente está tirante.

Lo primero que habría que hacer para saber cuál es nuestro tipo de piel sería observarla. Sin más. ¿Cuando pasas el dedo por tu cara la notas seca y con pequeñas líneas que hacen ver que tu piel está «rota» o, en cambio, tu dedo se queda brillante? Si ocurre lo primero, tienes piel seca. Si tu rostro cuenta con cierto acné , brillos y algún que otro poro , no hay duda: tienes piel grasa .

La piel seca tiene diversas características: tirantez, irritación y en ocasiones se puede observar la descamación e incluso rojeces. Dice Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia son pieles que carecen de luminosidad y son «ásperas al tacto». Las personas con piel seca la notan poco confortable y tirante y necesitan texturas untuosas que les permitan hacer frente a esa sensación de incomodidad: «La piel seca suele presentar arrugas y líneas de expresión marcadas de forma prematura. En invierno sufre mucho por el frío, el viento o la sequedad ambiental provocada por la calefacción», dice la experta.

¿Qué es lo que hay que tener en cuenta si se tiene la piel seca ? Rocío Escalante advierte de que la limpieza es una agresión para este tipo de dermis porque el agua puede irritarla , «así que hay que evitar los productos que se retiran con agua»: «Aconsejo limpiadores suaves e hidratantes, y las mejores texturas son los bálsamos y las leches limpiadoras». La hidratación es esencial en la piel seca, y hay que usar cremas que ayuden a reponer lípidos, con ceramidas, principalmente, y todo tipo de cosméticos en los que se especifique que son para piel seca. También es importante utilizar a diario protección solar.

Aquellos cuya piel tiene brillos saben lo que es lidiar con una dermis grasa y lo que eso conlleva: más granitos que pueden reconducir a acné, lavarse la cara constantemente y no necesitar de ciertos productos como aceites faciales o sérums. Las pieles mixtas y grasas son las más habituales entre las mujeres jóvenes y de mediana edad y se caracterizan por un exceso de sebo , que se traduce en la aparición de brillos a lo largo del día, además de los posibles granitos y los poros dilatados.

Uno de los errores más habituales en el cuidado de estas pieles es que, muchas veces, no se hidratan correctamente, provocando su deshidratación . La clave para que la piel no presente brillos pero esté hidratada correctamente es elegir productos formulados específicamente para ellas. «Si tienes la piel grasa , dedícale tiempo a tus rutinas y cuidados diarios: en alimentación, ten en cuenta limitar el consumo de grasas e hidrátate a diario bebiendo mucha agua», recomiendan desde Freshly Cosmetics, expertos en el cuidado de la piel.

Sea cual sea el tipo de piel que tengas, la Doctora Gloria Garnacho Saucedo, defensora de usar muchos o pocos productos en función de cada paciente y su tipo de dermis, hace incapié en la importancia de seguir un orden para que la piel no sufra las temperaturas bajas ahora que estamos en la temporada más fría del año. «Primero sería lavarse la cara con un gel de pH con ácido adecuado al tipo de piel de cada uno. Después aplicar un tónico recomendado para pieles grasas con tendencia acneica y en pieles sensibles y reactivas. Luego vendría el filtro solar 30-50 para invierno o verano, aplicándolo diariamente. Usa hidratante en función de las necesidades de cada piel (a veces ya incluida en el anterior) y contorno de ojos adaptado», explica.