«Para conducir no hacen falta títulos»

El debate pronto se extendió entre los conductores: «Me parece bien porque hay mucho bruto en este gremio », consideraba José Luis Ruiz. Su compañero Ángel Rija, quien lleva 32 años conduciendo un taxi, conjeturaba: «Igual lo hacen para seleccionar a la gente en función de cierto nivel cultural . Somos muchos». Guillermo, un suramericano que lleva un año al volante, confesaba que él no tenía estudios .

Miguel Estévez es otro de los noveles en el sector. Lleva un año, como Guillermo. Teniendo en cuenta que el taxi ha sido su vía de escape con la crisis, ya que procedía del sector de la hostelería, manifestaba que no deberían «exigir ese nivel de estudios». Miguel tiene el antiguo Bachiller, «pero hay muchos compañeros que no tienen ni EGB. ¿Qué quieren? ¿Arquitectos al frente de un taxi? Mi hija lo es y como no encuentra nada al final va a tener que conducir un taxi, pero otros no tendrán títulos», protestaba.

En lo que concierne a la vestimenta, todos estaban de acuerdo en controlar el atuendo. «Es que hay chavales jóvenes que se ponen en bermudas . Hay que cuidar la imagen», sostenía José Luis. «A ver si me van a pedir a estas alturas que me ponga peluquín», añadía con sorna Ángel, al que le parecía bien el control, «pero no ir con uniforme».

Lo que critican los taxistas es que el Ayuntamiento haga caso omiso de sus peticiones. Los urinarios siguen siendo una «necesidad» que no atienden. Más aún «que exista un control de taxis piratas y VTC que suponen una competencia desleal », coinciden todos. Respecto a la regulación a 16 horas les parece una buena fórmula. Algunos las rebajarían a 14 para «desmontar el imperio de los floteros, que tienen el taxi todo el día funcionando».