Balance negativo para la cocina española en la nueva guía Michelín

Se confirmaron las sospechas. En la Guía Michelin 2012 España no sólo no suma ningún nuevo restaurante con tres estrellas sino que además pierde dos. Uno, El Bulli, tras su cierre a la espera del nuevo proyecto. El otro, Can Fabes, por la muerte en ... febrero de su cocinero y propietario, Santi Santamaría. El primero desaparece por completo de la guía roja. El segundo baja de tres a dos estrellas. Una enorme decepción para cocineros y aficionados que esta noche se han dado cita en el hotel Palace de Barcelona para asistir a la presentación de la nueva edición de la Michelin. Una gran fiesta gastronómica con platos elaborados por los principales restaurantes catalanes que sin embargo se ha visto empañada por la cicatería de los inspectores que tiene en España la marca francesa de neumáticos. Vuelve, como todos los años, la polémica sobre si nuestra cocina está bien representada por la guía o si por el contrario se la minusvalora en comparación con la generosa lluvia de estrellas que se lanza sobre otros países. Lo cierto es que en esta edición de 2012 sólo hay dos estrellas más en el conjunto que el año pasado, y que sólo encontramos cinco restaurantes con tres estrellas, aquellos que los inspectores consideran que tienen una “cocina de nivel excepcional que justifica el viaje”. Dos están en Cataluña (El Celler de Can Roca y Sant Pau) y tres en el País Vasco (Akelarre, Arzak y Martín Berasategui), que vuelve a recuperar el protagonismo en la guía. De nuevo se quedan a las puertas establecimientos con méritos más que suficientes como Mugaritz, Quique Dacosta o Atrio.