Andrew Cuomo consigue el gobierno del estado de Nueva York
El demócrata ha vencido a su rival, el republicano Carl Paladino
EFE
El demócrata Andrew Cuomo, hasta ahora Fiscal General de Nueva York, logró hoy el gobierno de este estado, al ganar en los comicios al republicano Carl Paladino, miembro del llamado Tea Party, por el 58% de los votos, según resultados preliminares.
Cuomo, de 53 años, ... llega así al gobierno del estado de Nueva York para sustituir a David Paterson, el primer afroamericano en lograr ese puesto en un estado que es bastión de los demócratas, y en el que según los medios de comunicación ha tenido el respaldo de la mayoría de los votantes en cada categoría de edad y de ingresos. A Cuomo, perteneciente a una de las dinastías políticas más conocidas de EEUU y que en 2002 también fue candidato a este mismo puesto, le votaron hoy nueve de cada diez afroamericanos, así como ocho de cada diez hispanos, siete de cada diez moderados y dos tercios de las mujeres, según proyecciones dadas a conocer al cierre de los colegios electorales de este estado. El nuevo gobernador de Nueva York es también uno de sus políticos demócratas más populares, es el hijo mayor de Mario Cuomo, que también estuviera a la cabeza del gobierno de este estado entre 1983 y 1994, y alguien que por más de una década, "quizás desde que nació", según decía hoy el New York Times, ha estado planeando su llegada a la mansión del gobernador. Conocido por una intachable carrera política, en la que ocupó un puesto en el Gobierno de Bill Clinton como secretario de Vivienda (1997-2001), Andrew Cuomo, ha contado durante su campaña electoral con el apoyo del ex presidente. Como fiscal general del estado, un puesto para el que fue elegido el siete de noviembre de 2006, se ha ganado la fama de ser una persona ética y recta, lo que también le ha valido críticas y enemigos, principalmente en Wall Street, un sector al que abrió varias investigaciones, algunas de ellas como parte de la lucha contra la corrupción.
Cuomo llega a Albany, la capital de Nueva York, dispuesto a aprobar el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero no apoya la legalización de la marihuana para uso médico, uno de los asuntos más controvertidos de los últimos meses en Estados Unidos y que hoy se vota en California. Nacido en Nueva York en 1957, Cuomo está divorciado de Kerry Kennedy (hija de Robert F. Kennedy y Ethel Skakel Kennedy), con quien tiene tres hijas, las gemelas Cara y Mariah, de 15 años, y Michaela, de 12 años, y es pareja sentimental de la empresaria y presentadora de televisión por cable, Sandra Lee. Tomará posesión de su cargo en enero de 2011 en sustitución de Paterson, que asumió el cargo a mitad de mandato para sustituir a Elliot Spitzer, que también fue fiscal del estado antes de ser gobernador y de dimitir por un escándalo sexual. Spitzer, ahora una de los analistas políticos de la cadena de televisión CNN y con programa propio, dimitió por el escándalo que provocó que saliera a la luz pública que utilizaba los servicios de prostitutas de lujo, cuya "madame", Kristin Davis, se presentaba también a estas elecciones con la legalización de la marihuana como bandera.
Cuomo, que en esta campaña también ha ayudado a los demócratas para afianzar sus candidaturas en el estado, impulsó siendo fiscal varias investigaciones contra los directivos de Wall Street, lo que despertó alabanzas, pero también críticas por parte de quienes vieron en ellas maniobras populistas en busca de apoyos. Opiniones igualmente enfrentadas generó su investigación de los supuestos escándalos publicados por The New York Times sobre Paterson, y que finalmente llevaron a éste a retirarse de la contienda electoral. Como candidato, Cuomo -al que muchos definen como un hombre cauteloso- siempre ha asegurado que trabajará con "honestidad" y en pro de "un gobierno efectivo" para que Nueva York "vuelva a ser un modelo nacional".
Cuomo ha acusado a demócratas y republicanos de haber puesto en práctica políticas bipartidistas que han llevado al estado "al borde del abismo" y propone un gobierno en el que se ahorren gastos, se reorganicen las agencias estatales y se invierta en los ciudadanos. El nuevo gobernador de Nueva York, el tercer estado más poblado de EEUU, tiene por delante el reto de cubrir el déficit de 9.000 millones de dólares que se prevé para el presupuesto de 2011 que será de unos 145.000 millones de dólares, y una cifra similar a la que ya han sido deficitarias las arcas neoyorquinas en el recién cerrado ejercicio fiscal de 2010. Los analistas no descartan que el nuevo gobernador de Nueva York tenga puesta su mirada en un cargo de más importancia de cara a las presidenciales de 2016.
Noticias relacionadas
- Boehner, nuevo presidente de la Cámara de Representantes
- Marco Rubio, la gran esperanza republicana
- Ni porros en California, ni sharia en Oklahoma
- El voto de castigo en EE.UU. otorga la Cámara de Representantes a los republicanos
- Susana Martínez, primera gobernadora hispana
- El «Tea party» se abre paso en el Congreso
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete