Una carga policial disuelve a los radicales al cortar Gran Vía tras dos protestas de estudiantes

Todo comenzó en la plaza de Canalejas. Sin alcanzar su objetivo, y tras permanecer un buen rato en una Puerta del Sol tomada, literalmente, por los agentes, una hora después seprodujo unapequeña carga en Callao, adonde acudieron tras correr por la calle del Carmen y cortar una Gran Vía abarrotada de transeúntes por celebrarse la Noche de los Teatros y una prueba ciclista.

Así lo explicaron testigos presenciales, algunos encargados de varios negocios. «Han disparado pelotas de goma y han echado mano de las porras para que se fueran. La intervención ha sido muy corta, vamos, muy light».

Ahí, los vándalos, de unos 18 años e incluso menores, se dispersaron por las calles aledañas rumbo a Plaza de España, Jacometrezo, Hortaleza y Fuencarral. No hubo detenidos pero sí varios identificados por la quema y el volcado de contenedores, precisaron fuentes de la Jefatura Superior de Policía. Un menor de 16 años resultó herido leve con una brecha en la ceja, según fuentes de Emergencias Madrid.

El colectivo «Toma la Facultad» y la Plataforma por la Defensa de la Educación Pública, la conocida como «Marea Verde», habían convocado dos manifestaciones distintas que confluían en la calle de Alcalá en el Ministerio de Educación. A la protesta contra la subida de tasas, el recorte de las becas y la LOMCE asistieron miles de personas.

Sin embargo, cuando la manifestación concluyó, los radicales de siempre se dividieron en dos grupos: unos prosiguieron Alcalá arriba y otros se desviaron hacia Gran Vía, lo que provocó el primer incidente. Los efectivos de la UIP tuvieron que ir detrás, impidiéndoles seguir esa ruta. Ante ello, algunos decidieron sentarse en el suelo mientras los comerciantes, asustados por la avalancha de jóvenes, echaban los cierres de sus comercios por miedo a sufrir destrozos.

El operativo de la Policía Nacional fue muy nutrido. Había unos treinta furgones de los antidisturbios con unos 150 agentes. Varios grupos se desplegaron en la zona con cascos, escudos y porras mientras los violentos se situaban enfrente, en clara actitud provocadora.

La tensión iba subiendo enteros a media que los alborotadores, a los que se unieron ya el grupo de Gran Vía, llegaba a la Puerta del Sol, en donde comenzaron a corear insultos contra la Policía.

Sobre las nueve y cuarto de la noche, el grueso de los radicales, ante el gran blindaje policial, se dirigieron por la calle del Carmen hacia la plaza del Callao. Cortaron la Gran Vía. Ahí fue donde la UIP les encerró en la esquina con Jacometrezzo y los disolvió. Éstos se dispersaron ya por las calles de Hortaleza y Fuencarral.