Isabel Pantoja: «Que venga lo que venga, pero será con las botas puestas»

«Por lo demás, que venga lo que venga y que sea como Dios quiera, pero será con las botas puestas, eso seguro», aseguró a la vez que el público la vitoreaba y le lanzaba mensajes como: «Isabel te queremos» o «Te apoyamos, artista».

Porque el concierto de Huércal-Overa no fue uno más en la agenda de la cantante, quien se ha subido al escenario siendo consciente de que si finalmente ingresa en prisión , éste sería el último que ofrecería previamente a su entrada en la cárcel.

De hecho, el pasado 17 de octubre, la artista conocía cómo el Tribunal Supremo desestimaba el incidente de nulidad planteado por ella contra la sentencia que la condenó a dos años de prisión y a una multa de 1,1 millones de euros por blanqueo de capitales.

Con este incidente, la tonadillera intentó retrasar la ejecución de la condena, aunque, una vez rechazado, deberá abonar en los próximos días el pago al que ha sido condenada, sin lo cual no será posible la suspensión de su ingreso en prisión, que los tribunales suelen adoptar cuando la pena no es superior a dos años, como es su caso.

A nadie le ha parecido casual el énfasis que Pantoja puso en canciones como «Voy a olvidarme de ti», haciendo hincapié en estas palabras: «Por culpa de ese amor, que es mi condena». Algo que no pasó desapercibido para un público que no dejaba de aplaudir y animar a la artista.

El concierto, que se celebró en la caseta municipal de Huércal-Overa, con un aforo de 2.000 personas que prácticamente fue cubierto, comenzó con la proyección de un vídeo en el que se mostraban momentos de su trayectoria profesional y aparecía junto a otros artistas como Rocío Jurado, Lola Flores, José Luis Perales o Manolo Escobar.