Nueva Barcelona, la ciudad que fundaron los exiliados de 1714 en los Balcanes

Cabe recordar que la fase final de la guerra reunió en Barcelona a partidarios del archiduque llegados de todos los rincones del país, y la caída de la ciudad los dispersó de golpe por Europa. A partir de 1733, la reconquista por parte de la Corona española de Nápoles y Sicilia empujó a la última oleada de refugiados catalanes hacia Austria. Allí, Viena fue el destino preferido de estos refugiados que se convirtieron en un problema de orden público para la Corona. Como solución, las autoridades decidieron instalar a esta población en el Bánato, una región fronteriza arrebatada a los turcos en 1716.

Los colonos negociaron desde el tamaño de las casas y el número de habitaciones de cada unaEl 4 de octubre de 1734, el Gobierno autriaco fundó en Zrenjanin (a unos 70 km al norte de Belgrado, Serbia) una Nueva Barcelona para los refugiados españoles, que tendría también el segundo nombre de Carlogaben, en honor al emperador Carlos.

Unos mil catalanes fueron embarcados en barcos austríacos y llevados a su nuevo hogar a través del Danubio. Entre 1735 y 1737, comenzaron la construcción de aquella nueva ciudad financiada por el Sacro Imperio. Los colonos catalanes negociaron desde el tamaño de las casas, el número de habitaciones de cada una, y hasta cómo iban a ser sus jardines.

Sin embargo, el sueño duró sólo dos años. Los enfrentamientos entre los Habsburgo y el Imperio otomano se reanudaron y la zona ocupada por los colonos catalanes, alemanes, serbios y rumanos sufrió numerosos ataques. Con la llegada de los turcos también desembarcó la peste que diezmó a la población. Los pocos que sobrevivieron abandonaron Nueva Barcelona y el rastro de la ciudad se perdió.

En 1808 un incendio arrasó lo que quedaba de la ciudad y, a fecha de hoy, apenas quedan restos del intento catalán por crear una Barcelona en medio de los Balcanes.