Suscribete a
ABC Premium

Otra vez, España paga

LA liberación del buque «Alakrana» es un motivo de satisfacción por la suerte de sus tripulantes, que ya están libres, pero abochorna por el lugar en que deja a España ante sus aliados y ante los secuestradores, convencidos nuevamente, después del éxito que tuvieron con ... el «Playa de Bakio», de que chantajear a nuestro país es rentable. Por eso resulta hasta patético que el PSOE felicite al Gobierno por su gestión de la crisis. Los únicos que pueden felicitarse son los piratas somalíes, que no sólo han cobrado otro rescate multimillonario, sino que también han creado un precedente sobre la debilidad de España. En lo sucesivo, el Gobierno no tendrá autoridad moral para no dar a futuros secuestros, sean cometidos por piratas o por otros delincuentes, otra solución que la de ceder al chantaje. Porque, en efecto, cuando se paga al secuestrador, el problema se soluciona. Ningún mérito hay en el Gobierno que dice sí a todas las condiciones de los secuestradores.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia