Bien los españoles y paseo para Federer
La belga Kim Clijsters fue la gran protagonista en la jornada de ayer del US Open. Reapareció en un torneo que ganó en 2005 después de haber estado dos años retirada. Demasiadas lesiones y reclamos personales la hicieron abandonar las pistas. Pero las echaba de ... menos. Este año ha vuelto y después de hacer cuartos en Cincinnati y octavos en Toronto consiguió una «wild card» para el US Open. Ayer abrió el torneo y despachó a la ucraniana Victoria Kutuzova con una contundente 6-1, 6-1, demostrando que no ha perdido la fortaleza física ni la pegada que la hicieron llegar al número uno en su momento.
En el resto de la jornada hubo pocas sorpresas, aunque la mayor (si bien relativa) fue que Youznhy despachara a Mathieu. Federer despachó al jovenzuelo local Britton por 6-1, 6-3, 7-5, con el único sobresalto de dos «breaks» logrados por el estadounidense en el segundo y tercer set. El resto fue como si el suizo paseara por el salón de su casa.
Los triunfos de los estadounidenses Andy Roddick, quinto favorito y Venus Williams, cuarta del cuadro femenino, echaron el cierre a la primera sesión del Abierto de Estados Unidos, marcada por la numerosa presencia local.
El tenista de Nebraska, finalista en Wimbledon, superó al alemán Bjorn Phau por 6-1, 6- y 6-2 y se enfrentará al francés Marc Giquel, que batió al ruso Dmitry Tursunov por 6-2, 5-7, 6-3 y 6-3.
Previamente, Venus Williams resolvió un apurado choque contra la rusa Vera Dushevina, que la echó contra las cuerdas en varios momentos del partido. De hecho, la raqueta de Florida, atendida dos veces por el médico de la organización de dolencias en su rodilla izquierda, navegó contra corriente tras ceder el primer parcial.
Terminó por dar la vuelta al partido (6-7(5), 7-5 y 6-3) y jugará contra su compatriota Bethanie Mattek Sands, que superó a la checa Iveta Benesova por 6-3 y 6-4.
Entre los españoles hubo más bueno que malo. Albert Montañés, como es habitual en él, peleó como un jabato, pero acabó perdiendo ante Soderling (6-1, 3-6, 6-1, 6-4) a pesar de que logró arrebatarle un set. El mejor fue Marcel Granollers, que libró una verdadera batalla ante un duro rival como es el alemán Zverev, que aquí se mueve muy bien. El español acabó ganando en cinco mangas de lucha encarnizada (2-6, 7-5, 3-6, 6-4, 6-0). También estuvieron muy bien García López, que ganó otro partido muy peleado al canadiense Peter Polanksy (6-4, 6-4, 5-7, 3-6, 6-1). Pena que ahora le toque Robredo, que derrotó en un buen partido al estadounidense Young en cuatro sets (6-4, 3-6, 6-2, 6-3).
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