Milagros Tolón, primera alcaldesa de Toledo gracias al apoyo de Ganemos

Milagros Tolón ha sido elegida alcaldesa gracias a los votos (9) de sus compañeros socialistas y a los de Ganemos (4), para así lograr la mayoría absoluta con 13 concejales. El resto del Pleno, PP y Ciudadanos, han votado a su candidato: Jesús Labrador ha logrado nueve votos y Esteban Paños tres.

En su discurso de investidura, Tolón dijo que su «compromiso» es «ser la alcaldesa de todos» y basó su «apuesta de futuro» en «el acuerdo y el consenso». Además de los lógicos agradecimientos, su primer «recuerdo» en su alocución fue para la asociación María de Padilla y para «todas las mujeres anónimas que han luchado por una sociedad más justa e igualitaria». También tuvo un «reconocimiento a nuestras madres, nuestras abuelas».

En cuanto a sus líneas maestras de Gobierno, Tolón aseguró que «no hay soluciones mágicas», si bien apostará por la «modernización, la competitividad y la cohesión social». «Nuestro Gobierno será el de la igualdad y nuestra prioridad será la creación de empleo», añadió.

Por último se dirigió a Emiliano García-Page , anterior alcalde de Toledo y próximo presidente de Castilla-La Mancha, que «será nuestro primer aliado», y se acordó de su familia, en especial de lo orgulloso que estaría su padre, también socialista, y ya fallecido. Tolón acabó por recitar los versos de Gómez Manrique que adornan las paredes de las escaleras del Ayuntamiento y que animan a «trabajar por los comunes provechos».

Previo al discurso de Tolón, la ceremonia de investidura comenzó con el juramento de los 25 concejales que conforman la nueva Corporación y la votación para elegir regidor. Una vez proclamada Tolón alcaldesa, se produjo el traspaso del bastón de mando de manos de Page y la imposición de una medalla, y a continuación la nueva alcaldesa impuso las medallas al resto de concejales.

La anécdota de la ceremonia llegó cuando los concejales juraron su cargo: mientras los del PP lo hicieron con un crucifijo, este signo religioso desapareció cuando lo hicieron el resto de concejales del PSOE, Ganemos y Ciudadanos. Y como los concejales iban saliendo al estrado por orden alfabético, el crucifijo apareció y desapareció en la mesa. según el partido al que pertenecía el concejal.