Si te llevas el móvil a la playa o a la piscina, atento: estas son las consecuencias de dejarlo muchas horas bajo el sol

Sin embargo, llevar nuestro smartphone junto a nosotros puede no ser la mejor idea, pues las larguísimas horas de exposición al sol pueden llegar a afectar a su funcionamiento. El sobrecalentamiento de nuestros teléfonos se ha convertido en algo que sucede recurrentemente cuando se registran tan altas temperaturas y, en algunos casos, puede llegar a estropear su batería e incluso hacer que nuestro móvil quede completamente inservible.

Esto suele suceder cuando dejamos el móvil en una zona donde los rayos del sol incidan directamente. Por ello, existen una serie de recomendaciones que debemos seguir si no queremos tener problemas con nuestro smartphone a lo largo del verano.

El calor se ha convertido en una de las principales preocupaciones a la hora de usar el teléfono este verano. Todos hemos visto en alguna ocasión un mensaje de advertencia que avisaba de que la temperatura de nuestro móvil era demasiado alta y, con los altísimos valores que se están viviendo durante las últimas semanas, es cada vez más habitual.

Para evitar que la batería de nuestro teléfono se achicharre en la playa o en la piscina, es recomendable seguir una serie de consejos para poder proteger el móvil del sol. Entre ellos, evitar la exposición directa a las altas temperaturas, quitarle la funda para permitir que se ventile o evitar el uso de aplicaciones muy pesadas.

El sol no es el único enemigo de nuestro móvil de cara a este verano: el agua también puede afectar seriamente a las prestaciones de nuestro teléfono si no tenemos cuidado. Y es que, aunque muchos smartphones están preparados para resistir al agua, hay otros tantos que no cuentan con esta certificación.

Debes tener en cuenta, además, que incluso los teléfonos que presumen de estar a prueba de agua pueden ir perdiendo resistencia. Esto sucede por el desgaste en el sellado de las uniones entre las piezas, ya sea por golpes, rozaduras o por el simple paso del tiempo. Por ello, te recomendamos que, antes de introducir tu teléfono en la piscina o la playa, te asegures de que es capaz de resistir.