Trucos para aprovechar los AirPods

Para enlazar los AirPods con el iPhone, basta con abrir el estuche de carga cerca del «smartphone». Y con un toque en la pantalla quedan conectados con los dispositivos de la marca, tales como el iPhone, iPad, el Apple Watch y cualquier otro. Eso sí, únicamente aquellos que estén vinculados con la cuenta del usuario en iCloud, el servicio en la «nube» de la compañía.

Según destaca la compañía norteamericana, al estar enlazados con el iPhone y Apple Watch a la vez el sonido pasa de uno a otro dispositivo sin interrupciones. Así, para oír algo en el ordenador Mac o en el iPad tan solo hay que elegir la opción AirPods en esos dispositivos. Un procedimiento sencillo y que facilita la transición y el cambio de un aparato a otro.

Con una sola carga, los AirPods permiten escuchar música en torno a las cinco horas. Eso sí, para recargarlos es necesario introducirlos en su estuche, que permite múltiples cargas adicionales facilitando unas 24 horas de audición. Cada vez que se introducen los auriculares en el estuche durante 15 minutos se obtienen tres horas más de audición, destaca la compañía americana. No obstante, en caso de viajes largos, por ejemplo, en los que pueden usarse los auriculares durante mucho tiempo, mientras se están cargando no se pueden usar. Un problema.

Un dato importante es conocer el nivel de duración. Para saber cuánta batería queda, basta con acercarlos al dispositivo o preguntar al asistente virtual Siri de viva voz. En primer lugar, existe un «widget» propio para conocer la información de la batería y que se puede activar en el panel de notificaciones de iOS. Otra opción es tirar de la pantalla que aparece cuando los auriculares se emparejan con el dispositivo. Para ello, es necesario depositar los AirPods en su estuche y, a continuación, abrirlo. En pocos segundos aparecerá un panel con la información.

Los sensores integrados detectan cuándo el usuario los lleva puestos; y detienen automáticamente la reproducción al quitárselos. Mientras escucha música, si el usuario se quita uno de los auriculares para hablar con alguien, la reproducción se detiene al instante. Y la música vuelve a sonar al ponérselo de nuevo en el oído. Esta es una opción, sin embargo, que se puede desactivar. Para ello, hay que ir al panel de Ajustes donde se organizan los dispositivos conectados a Bluetooth y pinchar en «Información». Allí aparecerán algunas opciones.

Para activar Siri y dictarle órdenes hay que tocar dos veces con el dedo cualquiera de los dos auriculares. Los sensores internos pondrán al software en modo escucha, y pondrá en práctica lo que le pida el usuario con la voz: desde escuchar una determinada canción o música de un artista, a subir o bajar el volumen, consultar el nivel de carga, o cualquier otra orden a ejecutar por el asistente.

Quizá, lo ideal, es que el sistema permitiera dar dos toques para subir rápidamente el sonido, ya que pasar por Siri ralentiza algunos comandos. El problema es que Siri, sin una conexión potente, no hace mucho caso. Para sacarle partido a los comandos de voz sin el uso de este asistente en la calle por ejemplo se puede optar por un método más rudimentario: activar el control por voz (Voice Control) clásico, que responde cuando mantengas pulsado el botón de inicio.