EXPV, un yate de lujo dividido en dos que brinda gran privacidad

La superestructura de este modelo se parte en dos quedando la suite del propietario y las de los invitados completamente separadas. Así, la primera ocupa la sección delantera y el área de huéspedes la popa. Las dos estructuras cuentan con escaleras y ascensores separados, pero también están conectadas por un puente de vidrio flotante y un club de playa en la cubierta inferior del barco con plataformas plegables en ambos lados, un salón interior y una piscina.

Según sus diseñadores, el concepto de este barco de lujo se basa en la premisa de que los propietarios deben tener su propia residencia pudiendo pasar así semanas a bordo con total privacidad, pero también puede interactuar con sus invitados en el bautizado como ‘Salón del océano’ , una estancia que situada en medio del barco ofrece todo tipo de comodidades.

Por su parte, las plataformas laterales hidráulicas de este espacio no están al nivel del agua sino un poco más arriba, lo que significa que pueden desplegarse en condiciones bastante duras sin el golpe de olas o el riesgo de inundación ofreciendo mayor amplitud con una zona perfecta para descansar con vistas al mar.

Justo en la proa, en el nivel de la cubierta del puente, hay un rincón acogedor que se puede usar tanto para tomar el solo como para cenar. La suite principal de manga completa está en la cubierta de abajo. También hay una oficina, ubicada detrás de la caseta del timón, y en la parte superior un salón de observación con ventanas de suelo a techo y una terraza privada con vistas a la cubierta de proa.

En la otra estructura hay seis suites para invitados dispuestas alrededor de la popa en dos niveles de cubierta y todas tienen camas frente al mar con terrazas privadas. Los camarotes también se pueden combinar en suites VIP muy espaciosas dependiendo del número de invitados a bordo.

Además de todo esto dispone de un helipuerto que, situado sobre la sala de observación, ofrece acceso directo al apartamento del propietario. También cuenta con un garaje de apertura lateral debajo de la cubierta de proa con espacio para dos embarcaciones auxiliares de 13,5 metros sin restricciones de altura, así como para diferentes juguetes acuáticos.

Para el sistema de propulsión sus diseñadores han pensado en un híbrido diésel-eléctrico que permitiría alcanzar una velocidad máxima de 15,5 nudos y una autonomía de 6.000 millas náuticas.