Baños con un plus de exclusividad

Ante todo, tiene que dar respuesta a tus necesidades y adaptarse al espacio disponible. Porque ¿realmente necesitas que tenga sauna? Si la respuesta es sí, adelante, pero ante la duda, define el proyecto de una manera más personal.

En este camino hacia el baño perfecto, hay que establecer el equilibrio entre belleza y funcionalidad, entre estética y prestaciones, para que te sientas a gusto en él y sea cómodo en el día a día. La luz natural es un imprescindible, un ‘baño 10’ no puede ser oscuro sino que debe contar con una ventana –o ventanas– que lleven el sol a todos los rincones. Por supuesto, debe tener, además, una buena iluminación en las diferentes zonas, especialmente en la de tocador, para facilitar el afeitado por la mañana, por ejemplo.

La distribución cumple un papel esencial en este camino. Necesitas que te puedas mover libremente, que se adapte a tus rutinas de higiene y que saque partido al espacio. Di sí a la ducha, pero también a la bañera. Los nuevos cuartos de baño son espacios de confort, donde desconectar del estrés, cargar las pilas para el día siguiente y encontrar ese instante de paz y relajación que necesitas en tu vida. Di sí al bidé, un gran olvidado que suma puntos y adeptos cada día que pasa. Y, por supuesto, rescata la bañera exenta del baúl de los recuerdos. Se trata de una de las estrellas de los nuevos cuartos de baño. Capaz de integrarse en cualquier estilo, posee gran protagonismo, eclipsando, en ocasiones, al resto de elementos.

No lo decimos nosotros, sino los nuevos gurús del orden: al ordenar tu casa, ordenas tu vida. El orden y las soluciones para lograrlo son otro requisito para los cuartos de baño exclusivos. Desde muebles bajolavabos, con distribuciones interiores que nos permiten guardar (y almacenar) los productos que se acumulan, hasta armarios, encimeras que se alargan, columnas que imitan la organización en la cocina o auxiliares que se pueden trasladar de sitio, en función de las necesidades del momento.

Hay dos corrientes que conviven, sin inmiscuirse y sin entrar en guerra. Por un lado, tenemos que hablar del exceso, en todas sus variantes, y por otro, de lo natural y lo ‘eco-friendly’. La primera tendencia es barroca y recargada, pero también tremendamente bella y muy potente visualmente. Le gustan los materiales nobles, adora los brillos, especialmente los dorados, y no sabe decir que no a un buen espejo y a una buena tela o papel pintado. Mientras que la segunda, crea atmósferas idílicas, donde es necesario aparcar la prisa en la puerta. Sus ‘must’ son las maderas, los colores claros, las plantas y las piezas de fibras naturales.

También podemos hablar de un tercer tipo que es capaz de actualizar el estilo clásico hasta convertirlo en un lujo chic. Esta tercera tendencia incorpora los elementos arquitectónicos al ambiente y opta por un mobiliario sobrio, pero sofisticado.

Los nuevos baños deben ser, y son, inteligentes. Capaces de hacerte la vida más fácil, los sanitarios, las griferías y los materiales, en general, han sufrido una importante transformación. Hablamos de sanitarios que incorporan tecnología para la higiene personal; inodoros que se limpian solos y son más higiénico; rociadores que incorporan un altavoz para escuchar música mientras te duchas; o materiales de un grosor XS, que permiten composiciones imposibles hasta el momento.

¿Te imaginas disfrutar de un baño turco, una sauna o un baño burbujeante con efectos relajantes? No imagines y hazlo realidad, incluso en los espacios de pocos metros, ya que una bañera de hidromasaje ocupa el mismo espacio que un modelo tradicional, pero ofrece un mayor confort. Y si los metros no son un problema, apuesta por otras soluciones ‘wellness’, que te permitan vivir una experiencia única y extraordinaria.