Todo lo que debes saber sobre el sérum, tu aliado antienvejecimiento

El sérum o suero, como nos explica la farmacéutica Marta Masi , es “un producto con una alta concentración de principios activos, cuya textura, más ligera , logra alcanzar capas más profundas de la piel que, por ejemplo, las cremas, de forma que consigue resultados visibles de forma más rápida”. Se trata, en definitiva, de otro paso más en la rutina de cuidados faciales que te ayudará a mejorar tu piel.

El sérum no sustituye a la crema hidratante, es un complemento a tu tratamiento diario. Hay sérums hidratantes, antiarrugas, antioxidantes, anti-acné, seborreguladores, exfoliantes, despigmentantes, iluminadores… Así que su función depende del producto que elijas y de los ingredientes que incluya. Si tienes la piel grasa, un sérum anti-acné y seborregulador te ayudará a combatir el exceso sebo y luchar contra el acné. Los sérums hidratantes son excelentes para incrementar los resultados de las cremas hidratantes y mantener la elasticidad de la piel más seca. Los sérums antiarrugas te ayudarán a borrar las líneas de expresión y las arrugas, mientras que los despigmentantes se encargarán de controlar las manchas.

Según la farmacéutica Marta Masi “no es un paso obligatorio, pero dentro de una buena rutina de belleza no deberíamos olvidarlo, si queremos conseguir unos resultados en menos tiempo ”. Dada la gran cantidad de tipos de sérums, la clave está en elegir el que necesite tu piel o el que pueda ayudarte a conseguir que se vea más radiante, combatiendo, las arrugas, las manchas, los poros dilatados, la sequedad de la piel… en definitiva, el problema que más te preocupe.

El sérum siempre se debe aplicar sobre la piel limpia y seca, después de la limpieza y del afeitado . Y si utilizas crema hidrante, debes aplicarlo antes que esta. Así que el ritual de belleza por la mañana quedaría: limpieza, tónico (si usas), sérum, crema hidratante y protector solar. Algunos sueros se pueden utilizar solos, según tu tipo de piel. Por ejemplo, en el caso de las pieles normales-mixtas, los dermatólogos aconsejan aplicar un sérum antioxidante, rico en vitamina C y el protector solar, únicamente.

Según el producto que hayas elegido deberás aplicarlo solo por la mañana, solo por la noche o mañana y noche. También es posible combinar diversos sérums, si buscas diferentes objetivos. Por la mañana, es más aconsejable elegir un sérum antioxidante, con vitamina C, que te proteja de los radicales libres (del sol, la contaminación, el estrés…), responsables del envejecimiento prematuro de la piel. Por la noche, se utilizan los sueros con ácidos como glicólico, salicílico o retinol, que ayudan a renovar la piel mientras duermes. Otros tipos de sérums se pueden utilizar mañana y noche.

Es importante que tengas en cuenta que los sérums no suelen incluir filtros de protección solar , a diferencia de muchas cremas hidrantes, por lo que siempre debes aplicar después del sérum tu crema o tu protector solar. En general, salvo que en el producto se indique lo contrario, puedes aplicar la crema a continuación del sérum, no hace falta esperar.

El sérum, al tener una textura muy ligera, cunde mucho, así que solo necesitas 4-5 gotas para el rostro y el cuello . Y recuerda, si quieres mejorar tu piel en poco tiempo, añade un sérum a tu rutina de belleza.