Sanidad rompe el diálogo con las comunidades e impone las mascarillas

El ministerio ha presentado una propuesta con varias medidas a las comunidades y les ha dado 48 horas para pronunciarse pero según ha podido saber ABC, todas las regiones, excepto Cataluña, han rechazado ya esa propuesta. Incluidas las tres en las que gobierna el PSOE (Asturias, Navarra y Castilla-La Mancha)- El ambiente, en palabras de algún consejero, ha sido de «enfado generalizado». Las autonomías han abogado por que el uso del cubrebocas no sea obligatorio, sino que cada comunidad pueda establecer sus criterios de exigencia o recomendación en base a sus particularidades, como la incidencia de infecciones respiratorias que tenga, es decir, lo que ocurría hasta ahora. De hecho, varias regiones como Comunidad Valenciana, Cataluña o Murcia ya habían impuesto su obligatoriedad.

Según confirman varios de los asistentes al encuentro, la mayoría de las autonomías han abogado por que se fortalezca la educación en lugar de la «imposición», de manera que el trabajo se centre en concienciar a la población sobre los casos en los que el uso de la mascarilla sea recomendable. Aunque ha terminado sin acuerdo, el ministerio ha informado de que su propuesta sigue vigente para «mantener el mismo nivel de protección para todos los ciudadanos y dar cobertura legal a las comunidades que ya lo han hecho».

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Sin embargo, tras la reunión, y pese a que no comparten que la obligatoriedad deba ser en todos los territorios, Canarias y Asturias se han sumado a la exigencia, que ya habían implantado previamente la Comunidad Valenciana, Cataluña y Murcia, de manera que las mascarillas vuelven a ser obligatorias en los centros sanitarios de esas comunidades.

Aragón, que el viernes solo impuso el cubrebocas para profesionales sanitarios, este lunes lo ha ampliado para pacientes en las salas de espera de los centros de salud y hospitales.

Entre las medidas, además de establecer la obligatoriedad de la mascarilla en centros sanitarios o de la autobaja a través de una declaración responsable y sin tener que pasar por la consulta médica para procesos leves inferiores a 3 días, el ministerio proponía recomendar el cubrebocas en centros residenciales de personas mayores y personas con discapacidad, aunque no de forma universal.

Sanidad también propone que todos los hospitales y áreas sanitarias cuenten con planes de contingencia para enfrentarse al incremento de carga asistencial. Estos planes, plantea el ministerio, pasan por incluir un refuerzo de recursos humanos y materiales, reorganizar los servicios y en caso de ser necesario establecer criterios de priorización que impliquen aplazar intervenciones, pruebas o consultas de carácter no urgente. El documento también aboga recomendar a la población general que no acuda a los centros sanitarios cuando tengan síntomas respiratorios leves, así como reforzar las unidades de hospitalización domiciliaria. Las comunidades han recordado a la ministra que ya cuentan con estos planes.

El ministerio propone además que se recomiende a la población general el uso de la mascarilla en caso de tener síntomas, que se insista en la importancia de las medidas de higiene como el lavado de manos o que las comunidades establezcan unas recomendaciones de ventilación para centros escolares y de trabajo, así como protocolos de ventilación en centros públicos.

Varias comunidades han denunciado que el ministerio les haya facilitado el documento con las propuestas en la misma mañana del lunes, con la reunión ya iniciada, de manera que no han tenido tiempo de estudiarlas, tal como aseguran varias autonomías a este medio. Además, han lamentado también que se haya convocado a la Comisión de salud Pública -en la que se reúnen los técnicos que evalúan las medidas- para el próximo 18 de enero, cuando consideran que el ministerio ya debería haber convocado esa reunión y tomar decisiones en base a esas recomendaciones.

La Comunidad Valenciana, Cataluña y Murcia ya anunciaron el viernes que la mascarilla volvía a ser obligatoria en los centros sanitarios. Aragón optó entonces por imponerla también, aunque solo para personal sanitario, pero este lunes lo amplía también a pacientes. Ahora, sin una decisión común de momento, las comunidades irán por libre en este aspecto.

Desde el PP, se lamenta que la reunión haya llegado tan tarde, una vez que han pasado ya todas las reuniones y comidas familiares. Además, se critica que la ministra haya tardado en reaccionar y que lo haya hecho de esta manera, entregando las propuestas durante la reunión. «Todo esto es poco serio y suena a postureo. Hay que dejarse de política frívola y que los que asumen la responsabilidad entiendan que tienen que actuar con más rigor y celeridad», expuso Borja Sémper, que ejerció de portavoz del PP en la rueda de prensa posterior al Comité de Dirección del partido.

Sémper hizo hincapié en que todas las comunidades -menos Cataluña- han votado en contra de las medidas del ministerio, incluidas Asturias, Navarra y Castilla-La Mancha, las únicas gobernadas por el PSOE. «Ni siquiera en Melilla y Ceuta, donde el Gobierno tiene competencias sanitarias, han implantado estas medidas», denunció el político.