León XIII, el primer Papa grabado en vídeo

León XIII, el Papa en cuyo honor ha tomado su nombre el recién elegido León XIV, fue el primero en ser grabado en vídeo. Nacido en 1810, el contenido fue grabado a finales de 1800. El motivo, callar los rumores que se estaban lanzando desde diferentes cancillerías mundiales sobre el supuesto delicado estado de salud del Pontífice. Hacía diez años que no se le fotografiaba siquiera.

En las imágenes puede verse al Santo Padre bajando de un carruaje por los Jardines Vaticanos. Va acompañado de colaboradores y escoltado por la guardia pontificia.

Tras caminar con cierta dificultad, ayudado de un bastón y acomodarse posteriormente, comienza a bendecir mirando a una cámara, para una cinta que ha quedado para la historia.

Precisamente esto último hizo que la película causase furor, ya que había quien pensaba que el Papa bendecía a quien la viera, informa Javier Martínez-Brocal. Sin embargo, en El Vaticano ocurrió todo lo contrario: cuando descubrieron que se proyectaba también en «lugares silenciosos», se decidió emprender una 'damnatio memoriae' [condena de memoria, una práctica consistente en borrar todo lo que recordase a alguien considerado un enemigo del pueblo] contra su autor.