El clima árido avanza en España a 1.500 km2 al año

El clima árido se caracteriza por la escasez de agua para las plantas, ya que la evaporación es mayor que las precipitaciones. El portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, ha explicado este lunes que la expansión se debe especialmente al aumento de las temperaturas, con casi un grado y medio (1,4ºC) más de media anual en España. La caída de las precipitaciones, entre un 10 y un 12%, también ha influido, aunque en menor medida por su evolución menos lineal.

«Cada cinco años, una extensión equivalente a la de la provincia de Málaga adquiere un clima árido en nuestro país», ha explicado la Aemet. Si en los años 50 había dos zonas áridas claramente separadas en España en la meseta sur y el sureste peninsular, estas se han ido expandiendo hasta formar, a partir de los años 70, una misma extensa zona árida. Ahora, este clima con déficit hídrico predomina en zonas del sur de la Comunidad de Madrid, donde antes no se daba. También áreas de Castilla-La Mancha, la provincia de Badajoz, este de Andalucía, suroeste de Castilla y León y entorno de la depresión del Ebro.

Avance del clima árido en España

De 1991 a 2020

De 1951 a 1980

Fuente: Aemet / ABC

Avance del clima árido

en España

De 1951 a 1980

De 1991 a 2020

Fuente: Aemet / ABC

Dentro de los climas áridos, el estepario es el que ocupa una mayor extensión en España. Se ha duplicado durante el periodo de estudio, al pasar de un 10% a más del 20%, habiéndose producido este crecimiento principalmente en los decenios de los años 1990 y 2000. El clima desértico, por ahora, ocupa una superficie residual en la Península, en torno al 0.3 % del territorio.

A la vez que aumentan los climas cálidos y secos, merman los fríos. Aunque tradicionalmente han estado reducidos a sistemas montañosos, en el Pirineo, la cordillera Cantábrica, sistemas Central e Ibérico, Sierra Nevada y en la cumbre del Teide, cada vez abarcan menos espacio. De ser un 2% de la superficie de España hace setenta años, a no llegar al 1%. Están perdiendo unos 124 km2 al año.

Este estudio, sin embargo, no permite establecer una predicción sobre el crecimiento de estas áreas en el futuro. El clima «no es tan lineal», ha explicado la portavoz de la Aemet, Beatriz Hervella. Sin embargo, sí ha apuntado a que todo indica a que la tendencia continuará.

También continuarán las temperaturas por encima de lo normal este otoño, especialmente en el área mediterránea, según la predicción estacional publicada por la Aemet, válida para septiembre, octubre y noviembre. Será seco al menos en el noroeste peninsular, mientras que no hay una señal clara para el resto del territorio.

Con los datos del verano ya cerrados, la Aemet ha confirmado que este verano ha sido el más cálido de la serie histórica, que se remonta a 1961, e incluso, el más cálido del último siglo, según Del Campo. Los días de ola de calor, un total de 42, multiplicaron por siete a los que se registraron de media en los años 80 y 90, que apenas eran seis. También mayo se ha convertido en un mes de características plenamente estivales, convirtiendo el cuatrimestre de mayo a agosto en el más cálido y seco de toda la serie. Este será "un verano normal o incluso frío" de los que se esperan entre 2041-2060, según las proyecciones de los expertos en cambio climático de la ONU, dijo Del Campo.

A diez días de concluir el año hidrológico, se trata del segundo más seco de la serie, solo por detrás de 2004-2005. Sin embargo, las lluvias abundantes, e incluso intensas en algunas zonas previstas para los próximos días podrían hacer que este año hidrológico se quede 'solo' como el tercero o cuarto más seco.