Acción Comadres, la organización que gestionará los beneficios del libro de Fallarás cuestionado tras el escándalo de Errejón

Fallarás señaló el viernes que, una vez que estalló el escándalo, en tan solo 24 horas le habían llegado «casi una docena» de relatos que señalaban también a Errejón. Estos no son los únicos que ha recibido y ponen en el punto de mira a altos cargos del mundo de la política, la cultura o el periodismo. La comunicadora lleva años usando sus redes sociales como altavoz para aquellas mujeres que quieran contar episodios que hayan vivido de acoso, abusos o agresiones sexuales y tomarán forma en un libro que publicará el próximo 11 de noviembre – 'No publiques mi nombre' (editorial Siglo XXI)– y que recogerá en torno a un millar de testimonios.

Aunque se conocía que la periodista estaba preparando este libro, el anuncio de su publicación en tan solo unas semanas ha despertado muchas críticas, ya que numerosas personas consideran oportunista su difusión. Sin embargo, Fallarás ha subrayado que esta recopilación «no sale al calor de Errejón», sino que es algo que lleva meses trabajando y ha hecho «de forma voluntaria, activista y sin cobrar un duro».

«Los derechos de autoría de este libro, para los que están diciendo que me voy a lucrar, los gestionará por contrato una asociación sin ánimo de lucro formado por mujeres de todos los ámbitos», ha explicado la periodista. Esta entidad es Acción Comadres y en su propia página web especifica quiénes arrancaron este proyecto y forman parte del mismo: María Botto, Amparo Sánchez, Cristina Fallarás, Karmele Marchante, Violeta Assiego, Marisa Kohan, Zinnia Quirós, Lydia Aguirre y Piluca Baselga.

Fallarás, quien forma parte de la asociación, ha manifestado que llevan dos o tres años trabajando en este tipo de testimonios y haciéndolos públicos. «Preparar un libro como este lleva meses y meses de trabajo», ha apuntado, y ha insistido en su cuenta de Instagram: «Los beneficios que pueda llegar a dar será algo que reinvertiremos en los relatos de estas mujeres».

Esto es algo que la propia asociación ya hacía con el grupo teatral que impulsaron hace unos años, dirigido por María Botto, y que responde al mismo nombre, aunque se autodefine más como una «acción feminista» que como una obra de teatro. Ahí también se comparten muchas experiencias relacionadas con el acoso sexual o la violencia machista.

La Sala Mirador, teatro donde la obra ha sido representada, expone que se trata de un ejercicio que consiste en «eliminar la ficción y la representación a la hora de mostrar un diálogo entre ellas en un espacio íntimo/privado y exponer en público su intimidad. [...] Responde a las realidades que van sucediendo». «Una 'performance' feminista transformadora a través del relato íntimo de un grupo de mujeres valientes y diversas», indica la propia organización en su cuenta de Instagram.

En la Ley 31/2022, de 23 de diciembre, de los Presupuestos Generales del Estado para el año 2023, se concedió una subvención de 100.000 euros a Acción Comadres. Así lo recoge el Plan Estratégico de Subvenciones 2021-2023 del Ministerio de Igualdad. «'Comadres' está orientada a favorecer la participación de la diversidad de las mujeres en un espacio femenino empoderado a partir de un diálogo íntimo, en el que se plantean temáticas comunes. Las actuaciones de este colectivo coinciden con los objetivos encomendados al Instituto de las Mujeres», cita el documento.

La asociación no llegó a recibir este dinero. Según la magistrada Victoria Rosell, ex delegada del Gobierno contra la Violencia de Género y antes diputada en el Congreso por Podemos, «Acción Comadres iba a recibir una subvención en 2023, pero renunció». Sin embargo, lo que se establece desde el Ministerio de Igualdad es que esta partida no pudo tramitarse porque «la entidad no contaba con personalidad jurídica propia».

Irene Montero, que entonces se encontraba al frente del Ministerio de Igualdad, ha apoyado también la publicación del libro de Fallarás. En la página web de la editorial Siglo XXI se pueden leer varias recomendaciones de políticos y escritores, entre las que se encuentra la de la secretaria política de Podemos: «Romper el silencio y el miedo y la vergüenza, como hacen miles de mujeres al decir 'se acabó', es el primer paso para que sepamos que no es a una, que somos todas, y que tenemos derecho a cambiar juntas todo lo que tiene que ser cambiado hasta vivir vidas libres de violencias machistas».