Europa rechaza el informe que acusa a los alimentos trangénicos de ser cancerígenos

Sin embargo, el rechazo del informe, llevado a cabo por el profesor francés Gilles-Eric Séralini , no es una sorpresa, ya que en una primera evaluación los expertos de EFSA ya habían considerado que el estudio no se basaba en datos que pudieran dar por buenas sus acusaciones.

Concretamente, EFSA ha determinado a través de un comunicado que « las importantes omisiones en la concepción y la metodología » del informe « implican que las normas científicas aceptables no fueron respetadas y en consecuencia no está justificado volver a examinar las evaluaciones previas sobre la seguridad del maíz genéticamente modificado NK603».

Para sustentar esta afirmación, la entidad se ha basado en varias evaluaciones llevadas a cabo por sus expertos y por seis países miembros de la Unión Europea , por lo que considera que sus conclusiones son diversas e independientes. Por su parte, el profesor Séralini se ha defendido de estas acusaciones alegando « mala fe » en la decisión de EFSA.

La agencia también ha enumerado aquellos puntos en los que considera que el informe adolece de información. En concreto, estos abarcarían desde el escaso número de ratas utilizadas en el experimento hasta la escasez de detalles sobre la alimentación y el tratamiento de los susodichos animales.

El estudio, llevado a cabo en la Universidad de Caen, causño un gran revuelo al mostrar como a varias ratas les nacían grandes tumores después de ser alimentadas con maíz transgénico NK603, con maíz transgénico NK603 tratado con Roundup (el herbicida más utilizado del mundo) y con maíz no modificado genéticamente tratado con Roundup.