Imputado en el País Vasco un conductor que superaba ocho veces la tasa de alcoholemia permitida

Los hechos tuvieron lugar hacia las seis de la tarde cuando la Ertzaintza recibió la información de un usuario de la citada autopista que había observado la circulación anómala de un tráiler por la vía, en sentido Irun .

Al parecer el camión invadía el arcén y volvía a los carriles de circulación , pudiendo crear una situación de riesgo para los demás vehículos. A continuación, agentes de la Unidad de Tráfico, que se encontraban atendiendo un incidente en la autopista a la altura de Orio, procedieron a parar el vehículo pesado y a identificar a su conductor.

Los agentes advirtieron que la persona presentaba signos de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Por lo tanto, se le realizaron las dos pruebas correspondientes, las cuales arrojaron un resultado de 1,24 mg/l y 1,32 mg/l en aire espirado , cuando la tasa máxima permitida para este tipo de vehículos es de 0,15 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

En el tráiler implicado viajaba un segundo conductor, pero también arrojó una tasa positiva de alcoholemia , por lo que el vehículo articulado fue inmovilizado por los agentes y tuvo que ser retirado de la vía a través de un chofer de una empresa de grúas.

Este pasado verano, la policía francesa detuvo a un conductor vasco de 56 años que dio un resultado en los análisis de 4,75 gramos por litro de sangre ( 2,37 mg/l en aire espirado ) cuando la tasa máxima permitida en sangre es de 0,5 g/l (0,25 mg/l en aire espirado). El hombre llevaba 240 kilómetros al volante de su coche cuando le dieron el alto y no sabía ni de dónde venía ni a donde iba . Los gendarmes le llevaron directamente a un hospital cercano.

La tasa de alcoholemia más alta registrada en nuestro país corresponde a un conductor que fue detenido en Vitoria en febrero del año pasado cuando conducía con 2,88 mg/l en aire espirado (5,76 g/l en sangre). Los expertos, consideran que por encima de los 3 g/l en sangre, la mayoría de las personas están ya al borde del coma etílico.