España ofrece asilo... y también trabajo: las universidades se preparan para recibir a profesores ucranianos

En consecuencia, los ministros del Interior de la Unión Europea (UE) aprobaron el pasado jueves, por unanimidad, una « medida excepcional », la llamada protección temporal, «para brindar protección inmediata y temporal a las personas desplazadas de países no pertenecientes a la UE y a aquellas que no pueden regresar a su país de origen», explica la Comisión Europea en su página web.

Este plan conlleva un permiso de residencia para el tiempo que dure la protección (de uno a tres años), acceso al empleo, a la vivienda, a la seguridad social, a tratamiento médico y a la escolarización de los menores , entre otros derechos.

Pero España, y en concreto, su sistema universitario, ha ido un paso más allá y, además, esperarán a los refugiados ucranianos con trabajo . Es el caso, por ejemplo, de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) cuyo rector lanzó ayer un comunicado en el que se informa «que se está iniciando un procedimiento» para que los departamentos de la universidad puedan « invitar a docentes de universidades de Ucrania a realizar estancias de investigación por un periodo inicial de 3 meses ». Estas estancias las suelen hacer profesores que vienen a nuestro país a estudiar o a investigar y, en algunos casos, conlleva la impartición de clases. La ventaja es que en estos casos no se tiene por qué hablar español y si tienen que dar clase se recurre al inglés. La URJC comenzará «con un mínimo de 5 y un máximo de 10» profesores.

La Universidad Complutense de Madrid (UCM), por su parte, ha hecho una propuesta similar. Tanto el profesorado, como el equipo de dirección han sugerido para los ucranianos estancias de actividad investigadora o «algún tipo de "visiting" o beca», planteó un profesor de la Facultad de Geografía e Historia.

También la Universidad de Alcalá ha propuesto el acceso al sistema a través de la figura de profesores visitantes : en este caso, tienen que dar clase y, además, se puede plantear por un horizonte de más de un año. También la Universidad Carlos III de Madrid está considerando incorporar profesores ucranianos, como ya lo hicieron con afganos , aunque fuentes de la universidad no especifican la categoría, « dependerá de cada caso, si es doctor, doctorando, etc », aclaran. Fuentes de la Universidad de Sevilla también aseguran que «están en ello».

Muchos profesores, de motu proprio, han lanzado sus propias propuestas, como el ya mencionado de la UCM o Jesús García Laborda , decano de la Facultad de Alcalá que escribió una carta a su rector y también se dirigió a las universidades de Islas Baleares, Salamanca, Castilla-La Mancha o a la de Valencia con la idea de «darles entrada a los profesores de forma digna», comentaba en la misiva. Una idea, a su juicio, «trasladable a la Conferencia de Rectores (CRUE) y que si se asumiera podría incluir a diez profesores por universidad, lo que supondría más de 1.000». Consultada la CRUE, han señalado que ya están en marcha y que tienen «proyectos internacionales con Ucrania».

Por su parte, el ministro de Universidades, Joan Subirats, dijo ayer durante un encuentro con la rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda, que «queremos atender a las personas que han tenido que salir de Ucrania y quieran venir a España a estudiar o a mantener su profesión darles el estatuto de refugiado y el apoyo necesario».