Baleares se convierte en el nuevo punto negro del coronavirus en España

El punto de inflexión negativo cabe situarlo, como ha ocurrido en otras comunidades, en el puente de la Constitución . Sin embargo, en ninguna otra autonomía la evolución está siendo tan alarmante como en Baleares, una circunstancia específica que está analizando a fondo el Gobierno regional. El pasado miércoles, por ejemplo, se contabilizaron un total de 604 nuevos casos de Covid-19 en las Islas, lo que supuso el récord de contagios en un solo día desde el inicio de la pandemia.

Un hecho a recalcar es que, desde marzo, en Baleares se han dado casi todas las situaciones epidemiológicas posibles, incluida la de ser un referente positivo a nivel europeo a principios del pasado verano . Una situación intermedia se vivió el pasado mes de septiembre, cuando fueron cerradas perimetralmente dos áreas sanitarias de Palma y dos zonas de Ibiza por el incremento de casos de Covid-19 que hubo entonces. Posteriormente, el pasado mes de noviembre, fue la ciudad mallorquina de Manacor la que se vio afectada también por un cierre perimetral.

Ya en diciembre, las primeras decisiones para intentar atajar la actual tercera ola se tomaron justo después del puente de la Constitución. Así, el Ejecutivo que preside la socialista Francina Armengol decidió adelantar el toque de queda en Mallorca a las 22.00 horas a partir del 9 de diciembre. Esa restricción se ha mantenido durante la Nochebuena y la Navidad, así como también la limitación de un máximo de seis personas en las comidas familiares . Ambas medidas serán revisadas el próximo lunes por el Govern, pero todo apunta en estos momentos a que no sólo se mantendrán, sino que además se añadirán otras medidas en la misma línea.

Por lo que respecta al ámbito de la restauración, los bares y los restaurantes han de cerrarse en Mallorca a las 22.00 horas , salvo los fines de semana y las vísperas de festivos, en que el cierre debe ser a las 18.00 horas , para evitar los denominados «tardeos». Además, se han endurecido recientemente las sanciones económicas para las infracciones de la actual normativa anti-Covid cuando una isla esté en el nivel máximo de alerta sanitaria. Así, las faltas leves podrán ser sancionadas con multas de hasta 60.000 euros en esa situación. A ello habría que añadir que el pasado miércoles se inició el despliegue progresivo de 377 informadores para incidir en las medidas de prevención.

Tanto Armengol como la consejera de Salud, la socialista Patricia Gómez, han hecho llamamientos dramáticos a la ciudadanía en estos últimos días, apelando a la responsabilidad de todos para intentar frenar el continuo incremento de casos. Pero, de momento, el coronavirus sigue imparable en Baleares.