Se podría recuperar la población del águila pescadora en la península en dos años

El proyecto, motivado por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, realiza la reintroducción del águila pescadora mediante la técnica de «hacking» o cría semi-campestre ( extraer a las crías de sus nidos -normalmente de Finlandia, Alemania y Escocia - y trasladarlos a otros artificiales hasta que son capaces de volar por sí mismos). De este modo, los jóvenes identifican el área de reintroducción como su área natal, a la que regresarán para criar cuando alcancen la madurez sexual.

El proyecto cuenta en la actualidad con dos parejas reproductoras al año que han hecho posible cuatro nacimientos. Además, otras cinco más construyen nidos, pero «aún no han puesto huevos», señala Miguel Ferrer, presidente de la Fundación Migres y profesor de investigación de la Estación Biológica de Doñana, centro perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) . Ferrer ha recordado que esta circunstancia es «relativamente normal, pues son especies de madurez sexualidad retardada», y ha resaltado que «lo importante es el emparejamiento y la construcción de nidos». Ferrer augura que en 2011 se va a dar «un crecimiento sustancial del número de parejas reproductoras».

De los 130 pollos de la especie reintroducidos en Andalucía , 71 lo han sido en el sur de la provincia de Cádiz y 59 en el Paraje Natural de las Marismas del Odiel (Huelva).

El primer hito alcanzado por el proyecto fue el establecimiento, en 2005 y 2006, de una pareja reproductora en el embalse del Guadalcacín, a unos veinte kilómetros del punto de liberación establecido en el sur de Cádiz. El segundo, la constatación del retorno de aves reintroducidas, tras una permanencia de dos años en los cuarteles de invernada africanos.