Bruselas quiere regular el comercio de drogas «legales»

Por ello, tres comisarios europeos, Justicia, Industria y Derechos de los Consumidores, han decidido proponer la redacción de una legislación comunitaria que regule esas nuevas sustancias psicoactivas que tienden a ser utilizadas como alternativa a las drogas ilegales, como la cocaína, el éxtasis o la metanfetamina.

La Comisión ha reaccionado después de escuchar las advertencias que han lanzado tanto el Observatorio Europeo sobre Drogas y Toxicomanías (EMCDDA) como Europol, que ya ha detectado ramificaciones y vinculaciones con el narcotráfico.

El 5 % de los jóvenes europeos han consumido al menos una vez dichas sustancias que se comercializan sin obstáculos en internet o en los cofee shops de Holanda, donde se tolera el comercio de drogas «blandas» y sus imitaciones en otros países. Los más aficionados son los irlandeses, un 16%, seguidos por los polacos, letones y británicos con un 10%.

Según la EMCDDA, los países europeos han utilizado hasta ahora tres caminos diferentes para intentar regular la venta de estos productos: usando la legislación que se aplica a la protección de los consumidores, la que se refiere a las sustancias estupefacientes en general o reformando ambas para incidir en este campo.

Como la legislación europea sobre productos medicinales no exige claramente que estos tengan efectos terapéuticos, los productores de estas sustancias encuentran fácilmente un camino para vender sus productos. La Comisión propone que las sustancias que se considera que tienen un riesgo moderado serán sometidas a la legislación de consumo (que exige pruebas científicas antes de su comercialización) y las que se consideren peligrosas serán prohibidas.

La propuesta de crear una legislación europea fue presentada por la vicepresidenta de la Comisión y titular de Justicia, Viviane Reding, junto con el vicepresidente y comisario de Industria, Antonio Tajani, y el comisario de Salud y Política de Consumidores, Tonio Borg. Para Reding, «los euforizantes legales constituyen un riesgo creciente para los jóvenes europeos».

El número de nuevas sustancias psicoactivas detectadas en Europa se ha triplicado entre 2009 y 2012 y en lo que llevamos de 2013, los expertos han llegado a identificar una sustancia nueva por semana, mientras que en la actualidad la UE necesita un minimo de dos años para prohibir un producto. La propuesta de la Comisión ha de ser discutida en el seno del Parlamento y del Consejo.