Manu Tenorio: «Tengo un físico y una forma de cantar y componer que condicionan mi estilo»

Su «Colección indefinida» guarda un dueto con Joan Manuel Serrat que «justifica el disco, la carrera y la vida entera» del cantante sevillano. Aquella «Lucía» que interpretó junto a David Bisbal en la primera edición de Operación Triunfo y que, como recuerda Tenorio, sirvió para que «la canción se reimpulsara de una manera soberbia», entre las nuevas generaciones. «Yo lo siento -cantar con Serrat- como si me hubieran dado la medalla al mérito del trabajo. Es un tío fantástico y lo hizo todo muy fácil».

Manu Tenorio es noticia por este nuevo álbum y por el concierto que ofrecerá en el auditorio de FIBES el próximo 11 de mayo . El Paul Newman de la canción melódica española etiqueta el encuentro como «fiesta», y promete invitar a «compañeros de profesión» para hacerla aún más grande. Entre ellos podrían estar Rossana o Lolita, que también firman duetos con el sevillano en su «Colección indefinida».

«Estoy muy ilusionado, para mí es una fecha trascendente en mi vida y no solamente por el lanzamiento del disco. Por circunstancias que desconozco, hace muchos años que no canto en mi tierra, por eso es tan importante este día. Va a ser la primera vez que mi hijo (Pedro, nacido hace 5 años fruto de su relación con la periodista Silvia Salas ), me vea en directo en la ciudad de su padre. Es una fecha que quiero recordar cuando sea ancianito como un día inolvidable», apunta el cantante sobre una cita que por encima de todo entiende como un acto de agradecimiento. «Quiero aprovechar el concierto para darle la gracias a Sevilla, a mi público sevillano que me ha apoyado a lo largo de mi carrera. Para mí, esta fecha del 11 de mayo en Sevilla es cónclave en mi carrera, no es por llenar un estadio, es más que nada por un tema personal y sentimental».

Manu Tenorio se encuentra de promoción del álbum que sigue a «Con el alma encendida» (2015). Al octavo llegó el recopilatorio, una centena de temas reducidas a 17, a «75 minutos del más puro Manu Tenorio». Pero el sevillano no es el mismo de a principios del milenio. Y aprovecha cada entrevista para recalcar los pasos de su andadura en el mundo de la música. Un camino que, lejos de los brillos de las estrellas de OT de su edición y la desorbitante repercusión de la nueva generación (las Amaia, Aitana o Ana War ), ha sido complicado.

«Durante muchos años he sido un autoproductor, un artista independiente, aunque sea un término que se asocie a otros estilos de música. Ha sido una etapa muy fructífera, pero también muy complicada que ha durado ocho años. Tienes que encargarte de todo, desde la composición a la distribución. Ha sido un camino agotador , con mucho desgaste, pero también han sido escalones necesarios. Llegados a este punto vimos que era una buena oportunidad para volver con Universal».

Manu Tenorio, del que en las últimas semanas se ha hablado más de un supuesto cambio de look tras paso por el quirófano que por su nuevo trabajo, niega la cirugía y confiesa que lo único que ha cambiado en estos años ha sido su voz: «Realmente, como intérprete me noto la voz cambiada, es algo natural después de más de 15 años. Mi metal en aquella época tenía más brillo y ahora otros matices un poco más recortados. Pero me gusta mucho, incluso diría que me gusto más cómo canto ahora que antes».

El cantante sevillano parafrasea a Woody Allen para explicar la fórmula del éxito: «Un 95% trabajo, un 5% talento». Y como se considera currante con callo, no concibe renunciar a su estilo por tener más proyección. «Tengo una manera de componer y de cantar y un perfil físico que me condicionan. Aunque haga música de una manera o de otra, mi identidad queda muy marcada. Además, yo siempre me manejo en ciertas aguas que me hagan sentir cómodo y que no hagan sentirme que estoy fuera de lugar. Siempre sigo una línea, algunas veces empleo sonidos más acústicos, otras más eléctricos, otras veces influencias más flamencas», responde.

«El éxito es muy relativo, puedo decirlo con conocimiento de causa», sigue el intérprete, para zanjar con una frase rotunda: «Subirme al escenario para cantar algo con lo que no me identifico es una tortura».

Como él mismo declara en la entrevista, hace muchos años que Manu Tenorio no actuaba en Sevilla. Sin embargo, se siente profeta en su tierra, un 'cargo' que asume con «responsabilidad y orgullo» y que le hace repudiar los prejuicios con los que se topa. «Uno es andaluz y da la puñetera casualidad que cuando pone la televisión, la gran mayoría de los frikis que salen vienen del sur de España . Me revienta, sobre todo por el hecho de que se refiere a una tierra que probablemente tenga la mayor proporción de artistas por metro cuadrado. Me gusta ser de esos andaluces que defienden nuestra tierra con respeto y orgullo».

Lo mismo que le llega al corazón los halagos por su sevillanía y el cariño de sus seguidores, Manu Tenorio siente pena por las últimas polémicas en las que se ha visto envuelto. La más reciente fue hace apenas un mes, con motivo del 8-M. «Siempre he defendido los derechos de la mujer, he crecido en un círculo matriarcal y no tengo que demostrar nada ni posicionarme. Las mujeres que más me quieren son las que han luchado para que yo saliera adelante y siempre he tenido consciencia de eso. Esta crítica me dolió mucho personalmente, es algo que yo he vivido en mis carnes, pienso que las mujeres son el eje del mundo, por eso me ha molestado que se haya puesto en tela de juicio».

No es la única polémica por un supuesto machismo del cantante. Anteriormente, Tenorio dio su opinión acerca de la discriminación en el lenguaje y el famoso portavoz, portavoza de Irene Montero (Podemos). «Nos metemos en unas vueltas del lenguaje absurdas. Hay que preocuparse en temas más relevantes. Como todo lo miremos con microscopio vamos a encontrar polvo de todos lados», insiste ahora.

No parece que el sevillano se arredre en las redes sociales y ejerce su libertad a la hora de opinar. «Doy mi opinión donde quiero y cuando quiero, porque tampoco crea que sea mi obligación darla».