Los intentos de suicidio en Sevilla crecen un 60 por ciento desde 2020, especialmente entre jóvenes

Sólo en el Virgen del Rocío se contabilizaron 672 tentativas de suicidio, casi dos al día. En 2020 fueron 401 y en 2021 llegaron a 672. Hace menos de un mes un joven que había sido dado de alta tres veces en Psiquiatría se presentó en Urgencias del Virgen Macarena solicitando ver a un médico. Tras varias horas de espera, intentó ahorcarse con su cinturón y uno de los bedeles del centro sanitario que trató de evitarlo recibió un mordisco de este joven que le arrancó de cuajo la falange de un dedo. Este caso trascendió por ese motivo a los medios de comunicación por la brutal agresión al celador, pero las tentativas suicidas no dejan de ser algo hasta cierto punto habitual en las Urgencias de los grandes hospitales.

España sólo tiene 6 psicólogos clínicos y 11 psiquiatras por cada 100.000 habitantes, menos de la mitad que Alemania, Francia y Países Bajos tres veces menos que la media europea y cinco veces menos que Suiza. Y Andalucía continúa por debajo de la media española, 4,68 psicólogos clínicos y 6,75 psiquiatras por cada 100.000 habitantes, según datos oficiales.

Crespo Facorro destaca el esfuerzo que se ha realizado desde la Junta de Andalucía en los dos últimos años con la contratación de 212 profesionales de Salud Mental en Andalucía (no sólo psicólogos y psiquiatras) y las 106 previstas para este año («algo nunca visto en este área», dice). Pero hay muchos problemas para cubrir esas plazas porque no hay psicólogos clínicos, algo que viene ocurriendo en otras especialidades como medicina de familia o pediatría. «No se pueden improvisar estos profesionales, así que con los planes existentes para aumentar su número tardaremos cuatro o cinco años en formarlos y en poder contar con ellos. Quizá no haya más remedio que afrontar este tiempo con soluciones imaginativas porque si no contamos con silicona para sellar una tubería, que sería lo ideal, habrá que hacerlo con corcho o con lo que se pueda para tratar de achicar el agua que se está desbordando». La metáfora de este experto casa bien con los datos oficiales sobre aumento de consultas de Salud Mental. Al Virgen del Rocío llegan a diario cuatro o cinco personas diciendo que no tienen ganas de vivir: «Se está produciendo mucha más demanda de atención mental entre los adolescentes y los jóvenes y más hospitalizaciones y hay un nuevo perfil de pacientes que nos llega a las consultas con muchas tentativas de suicidio».

Este nuevo perfil es el de un adolescente o joven con gran inestabilidad emocional, incapacidad de interaccionar emocionalmente con su entorno, con alteraciones de conducta, incapaz de aceptar normas y con poca integración social por esa gran variabilidad de emociones. «Si esto no se trata adecuadamente en estadios iniciales puede acabar en TLP (trastorno límite de personalidad)», advierte el doctor Crespo Facorro, que es investigador de la red Cibersam ( Centro de Investigación Biomédica en Red del Área de Salud Mental).

Los psiquiatras que trabajan en los hospitales andaluces vienen detectando que están llegando más casos a Urgencias con problemas mentales y, sobre todo, más casos de personas jóvenes y en edad adolescente, lo que puede ocasionar incidentes en esas dependencias porque estas personas suponen un riesgo para sí mismas y para los demás. «Sería aconsejable que hubiera más psiquiatras en las urgencias especializados en jóvenes y adolescentes pero en este momento eso no es viable. También hacen falta más camas porque hay más personas que necesitan hospitalización por este tipo de enfermedades, pero aumentar el número de camas es una de las apuestas de la Consejería de Salud«, dice.