Emvisesa construirá una residencia universitaria en la Pablo de Olavide

El proyecto, que se encargó hace un año a los arquitectos Carmen Albala y Juan Carlos Cordero, se inscribe en el convenio de colaboración firmado entre Emvisesa y la Universidad y está avalado por un estudio de las necesidades de la UPO que asegura que los equipamientos más demandados por los usuarios del campus son una residencia y una guardería. A esto se añade una piscina climatizada con cubierta de 25 metros y seis calles a la que se anexarán los vestuarios y un gimnasio. La parcela en la que se ejecutará la iniciativa tiene 10.600 metros cuadrados y es la más próxima a la estación de Metro que da servicio a la Olavide.

La propuesta que se ha aprobado es la realización de los trabajos en dos fases. En la primera se harán todos los equipamientos no residenciales y un primer módulo del edificio, mientras que en la fase final se acometerá en su plenitud la residencia, que acogerá tanto a estudiantes como a personal docente. El presupuesto total de la obra es de 16.975.350 euros. Y todas las instalaciones contarán con medidas de ahorro energético con captación solar y aprovechamiento de aguas fluviales. Se trata de un edificio vanguardista que se instalará por un sistema de prefabricación de módulos, lo que permitirá reducir los plazos de la obra y, además, proyectar ampliaciones futuras adaptadas al diseño del edificio.

En la zona exterior habrá también un aparcamiento para 58 vehículos y otro para bicicletas. La guardería, por su parte, tendrá cinco aulas, además de una ludoteca, una sala de usos múltiples, otra de reuniones y una secretaría. Por su parte, la residencia contará con una zona de administración, sala de estar, sala de juegos y televisión, lavandería, cuatro módulos dobles para alojamientos familiares, dos módulos para alojamientos adaptados y 72 de alojamientos dobles. Una primera ampliación podría llevar la capacidad hasta 122 módulos dobles y 96 individuales, es decir, doscientas personas más de las previstas en la fase inicial. Además, los arquitectos aclaran en la redacción del proyecto que el diseño está concebido para hacer mejoras sin perjuicio para los residentes como «la disposición de usos comunes en la planta baja» o «una planta bajo rasante para estacionamiento de vehículos» con el objetivo de liberar espacio en la superficie para usos comunes de la residencia.