Hallan un ARN clave en el envejecimiento celular que podría abrir nuevas vías contra el cáncer

La senescencia es un proceso en el que las células dejan de dividirse al enfrentarse a diferentes tipos de estrés, como tratamientos de quimioterapia, daños en el ADN o acortamiento de telómeros, entre otros, pero no mueren, entrando en un estado de «reposo» o parada del ciclo celular. Este proceso, aunque no implica la muerte de la célula, sí puede tener consecuencias en el organismo, contribuyendo al envejecimiento y a la aparición de enfermedades

Estas células dañadas siguen activas y pueden participan en distintos procesos como la progresión tumoral o el envejecimiento, por lo que es fundamental conocer sus mecanismos de regulación.

Noticia Relacionada

La taurina no es la molécula de la longevidad

Rafael Ibarra

Un nuevo estudio revela que aún no hay consenso sobre su utilidad como biomarcador de salud o suplemento para prolongar la vida.

«Hemos identificado un ARN largo no codificante, al que llamamos sin-lncRNA, que se activa específicamente en distintos tipos de senescencia, como la provocada por oncogenes o por quimioterapia con cisplatino. En este estudio analizamos sus mecanismos y confirmamos que al silenciarlo cambian los niveles de expresión de genes vinculados al metabolismo energético», explican Maite Huarte y Marta Montes, codirectoras del trabajo.

Según las autoras, estos hallazgos tienen implicaciones importantes en el contexto del cáncer. «Hemos demostrado que la inhibición de este ARN en células de cáncer de ovario disminuye el consumo de oxígeno, lo que sensibiliza a las células al tratamiento con el fármaco cisplatino. Por lo tanto, nuestro estudio sugiere que sin-lncRNA podría ser una diana para mejorar la eficacia terapéutica de la quimioterapia».

Este trabajo aporta evidencia de que sin-lncRNA es un regulador específico del equilibrio metabólico en células senescentes. Además, abre nuevas perspectivas para el desarrollo de estrategias que combinen la inducción de senescencia con la eliminación de células senescentes, especialmente en el tratamiento del cáncer y en el estudio del envejecimiento.

«Nuestros resultados contribuyen a entender mejor cómo las células senescentes, a pesar de su menor potencial proliferativo, mantienen una actividad metabólica activa y adaptada a su estado. Resaltan también el papel fundamental de los lncRNAs en la regulación de procesos celulares complejos», concluyen las científicas del Cima.