Una experta en seguridad alimentaria advierte del error que comete la gente al comer mandarinas: «Es la parte más saludable»

La fruta es un alimento básico de la dieta ya que aporta numerosos nutrientes y una gran fuente de minerales, antioxidantes, fibras o vitaminas, entre otros beneficios.

Se recomienda comer estos alimentos a diario, e incluso que sean tres piezas al día para conseguir el aporte nutricional y vitamínico idóneo para nuestro día a día.

El 'universo de la fruta' es realmente variado ya que por cada temporada hay distintas variedades. Una de las más populares es la mandarina entre los meses de octubre y marzo, cuando está de temporada. Esta fruta es ligera, aporta mucha vitamina C y es fácil de tomar en cualquier sitio puesto que se pela muy rápidamente.

Aunque la temporada ya ha terminado, aún hay muchos que apuran las últimas unidades del año. En este sentido, hace semanas la experta en seguridad alimentaria Cristina Lora lanzó una advertencia sobre esta fruta.

«Hay dos Españas, las que se comen las hebritas y los hilitos blancos y las que los quitan porque les da un poco de asquito», reflexiona esta profesional. Su mensaje va dirigido hacia los segundos a los que explica por qué lo mejor es comer las mandarinas con estos hilos.

«Estas hebritas blancas se llaman albedos y es la parte más saludable que tiene la mandarina, contiene hasta 20 veces más d compuestos fenólicos que los gajos que son antioxidantes y un alto compuesto en pestina que es fibra que hace que se reduzcan los niveles de colesterol LDL en sangre», subraya.

Lora es también tecnóloga alimentaria por lo que anima a, ahora o en la próxima temporada de mandarina, acordarse de este consejo y no tirar las hebras: «Comételo».

Tal y como apuntaba en su primera reflexión, las reacciones de las personas se han dividido en dos grupos quienes reconocen que quitan los hilillos y quienes han afirmado no haberlo hecho nunca.

Otros han reconocido que no sabían que esta parte de las mandarinas tenían tantas propiedades y otros han bromeado con que ellos mismos o sus conocidos se tiran un buen rato pelando esta fruta antes de comerla.