Un español consigue entrar en Corea del Norte y explica lo que pasa con su pasaporte al llegar: es impensable en el resto de países ABC

A. Cabeza

Barcelona

Pocos países generan tanto misterio como Corea del Norte. Su régimen autoritario es uno de los más herméticos del mundo y apenas existe información certera sobre lo que ocurre en su interior, ya que solo se conoce una pequeña parte y que está ... muy controlada por su dictadura. Por ese motivo, atravesar sus fronteras es casi imposible.

En realidad sí se puede viajar a Corea del Norte pero, como siempre en este país, con fuertes restricciones. Así, el gobierno norcoreano autoriza periódicamente la visita de algunos turistas extranjeros, siempre a través de tours organizados validados y nunca por cuenta independiente. Ahora, Víctor Fernández, el popular youtuber español conocido como Caminante Rojo, ha conseguido acceder al país y lo ha empezado a contar en su cuenta de TikTok @caminante.rojo.

Él habitualmente sube contenido sobre las regiones más inaccesibles de Rusia y sus alrededores y ahora ha podido viajar a Corea del Norte y prevé contar su experiencia. Tras vídeos previos relatando cómo se acercaba «a su universo», llegó a al aeropuerto de Pyonyang con Air Koryo, la aerolínea estatal norcoreana. Ya allí, solo al bajar del avión, ya ha alucinado con los primeros controles, que ha contado en un vídeo que supera las 273.000 visualizaciones en solo un día.

Preguntas sobre todo el material electrónico que llevaba

«Una vez aterrizamos dentro del aeropuerto tuvimos que pasar varios controles», revela el Víctor, que especifica que le chequearon el equipaje con rayos x, le tomaron la temperatura, le revisaron los pasaportes y le efectuaron «otro control de rayos x donde los militares comprobaban la lista de los objetos electrónicos declarados y cuántos teléfonos teníamos».

Al 'tiktoker' le sorprendió, como explica en su publicación, que «también nos preguntaban si teníamos algún libro o lectura religiosa, ya que está totalmente prohibido entrar con ello». Víctor relata que se olvidó de anotar en su lista de material electrónico unas tarjetas de memoria para la cámara y que «el militar lo vio en los rayos x y lo dejó apuntado en la lista».

«Acto seguido nos dividieron a los 100 turistas del grupo en grupos de 20 y se quedaron con nuestros pasaportes», continúa él narrando su periplo inicial por Corea del Norte. A partir de aquí los llevaron a pequeños restaurantes que había en la segunda parte del aeropuerto y allí «las camareras nos esperaban con la comida preparada».

Todas estas explicaciones van acompañadas con imágenes de las colas que tuvo que hacer mientras esperaba los controles o del restaurante al que le llevaron con las empleadas pendientes de su llegada. 24 horas después de esta publicación Víctor no ha subido más contenido, aunque sí ha recibido múltiples comentarios de su experiencia.

En este sentido uno de los aspectos que más ha llamado la atención es la retirada de la documentación personal. «¿Es legal que te retengan el pasaporte?», se pregunta una tal Flor, mientras que otra internauta, Ester, asegura que «solo por el hecho de que se queden con mi pasaporte ya no iría... mi pasaporte siempre conmigo».

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