SALA DE MÁQUINAS
Sólo un fanático asesino
Ternera no descubre nada que no supiéramos ya porque los asesinos vocacionales no suelen guardar nada, más allá del horror de sus actos
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Iniciar sesiónY la montaña parió un ratón. El mismo ratoncito fanático y asesino que ya conocíamos, porque la entrevista de Évole a Josu Ternera no descubre nada que no supiéramos ya: el vacío frente al crimen; no hay nada más, porque los asesinos vocacionales no suelen ... guardar nada, más allá del horror de sus actos. ¿Alguien podía esperarse una revelación que pudiera hacernos comprender mejor la mente del criminal? Ternera aburre en un show televisivo y marketiniano a mayor gloria del negocio audiovisual, que además se ha beneficiado de las erráticas peticiones de censura previa, siempre peligrosas para la salud democrática y la libertad de información. Mussolini, Stalin o Ternera son entrevistables, porque siempre será mejor una mala entrevista a la prohibición preventiva. La clave está en el resultado y en la disposición crítica para enfrentarte a tal desafío. Si uno fuera Montanelli u Oriana Fallaci quizá se atreviera, pero los que no alcanzamos esa excelencia sabemos que apenas sirve para sacar a la bestia de paseo.
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