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Sala de máquinas

Ábalos, esto se ha terminado

Fuera del partido no era muy conocido, ni siquiera en la ciudad, y apenas se sostuvo un lustro en las cumbres del poder, gracias a Pedro Sánchez

Cerdán mantiene la interlocución con Ábalos y no le pide la dimisión

Un pinchazo telefónico entre dos investigados en el caso Koldo salpica a Ábalos

Julián Quirós

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Ábalos tiene detrás una larguísima vida política, casi siempre marginal, minoritaria, incluso en Valencia. Fuera del partido no era muy conocido, ni siquiera en la ciudad, y apenas se sostuvo un lustro en las cumbres del poder, gracias a Pedro Sánchez. Hicieron la escalada juntos ... y tres años después de llegar, el líder socialista le empujó sin miramientos ni explicaciones. Todavía no se ha contado la razón. Pero ahora sabemos que su exdirector de Carreteras está imputado en un caso de corrupción y Koldo, su hombre para todo, ha amasado una fortuna dando sablazos a un metro de distancia del exministro. El tema es éste, que se ha enriquecido por estar físicamente pegado al exministro, por haber sido elegido por el exministro para guardar sus intereses y llevarle sobres de 500 euros para lo que pudiera surgir en sus escapadas. No diremos nada más, de momento, pero apesta. Tanto que Sánchez lo va a rematar. Pronto. Y si el señalado se resiste es porque el asunto no termina ahí, en ese metro que separaba y unía a Koldo y Ábalos.

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