Perfil del aire

Pisos para asesinos

De las tumbas donde descansan los asesinados no ha dicho nada doña Reyes, la casera de los asesinos

22/05/2019 a las 00:44h.

Se llama Reyes Carrere, y es una de las mejores personas que uno se puede encontrar en este mundo. Lleva de forma callada y resignada -temple de espíritu, se llama eso- el nombre que le pusieron. Porque llamarse Reyes y ser la alcaldesa de EH ... Bildu a la Alcaldía de San Sebastián debe ser tan cómodo como apellidarse Iglesias o Monedero y liderar Podemos. Doña Reyes Carrere, que es un prodigio de bondad sin límites, ha propuesto en su programa electoral que los luchadores de la banda angelical de la ETA puedan vivir en pisos sociales de alquiler cuando dejen de ser presos políticos. Así. Tal como suena. Y lo ha dicho de una forma que no levantará ampollas en los manuales lingüísticos de la corrección política: esos pisos irán destinadas a «las personas donostiarras encarceladas». Feminismo gramatical para mayor honra y gloria de la futura alcaldesa.

La ironía chorrea sangre, y eso es lo malo. Si no fuera por esa circunstancia que para algunos es tangencial, podríamos reírnos de esta señora que no tiene empacho a la hora de apoyar a los asesinos de alguien que no puede presentarse a las próximas elecciones por causa de fuerza mayor. Gregorio Ordóñez no pudo ser alcalde de San Sebastián porque lo mataron a bocajarro. Mientras comía. Sin poder defenderse. ¡Ay, esos aguerridos gudaris que son ejemplo de valentía! Sobran las razones para que la candidata de Bildu, vulgo ETA, haga con ellos lo mismo que hacían los señoritos de antaño con sus amantes: ponerles un piso.

Nos enteramos de la noticia porque nos la envía Maite Pagazaurtundua, que con su apellido nos da medio artículo hecho. Maite es una luchadora por las libertades que honra a quien la tiene como amiga. Es mi heroína, y cuando se lo digo, se ríe y agacha la cabeza. Con ese pudor que rodea a los que son grandes de verdad. Maite se abrazó a una trabajadora del hotel donde se hospedaba cuando le dijeron que su hermano tenía una bala en la cabeza. Necesitaba abrazar a alguien antes de volver al paraíso de los del PNV. Ven y cuéntalo. ¿Recuerdan la campaña? Pues eso es lo que hace Maite. Ir a Europa y contarlo.

No podemos dejar que nos roben el relato, ni que ofrezcan pisos sociales a los asesinos que han segado la vida de los inocentes. ¿Alguien imagina que un candidato o una candidata hiciera lo propio con los nietos de los jerarcas del franquismo a los que quieren mancillar por lo que hicieron sus abuelos? Pues el mester de progresía no dice nada de esto. Como si fuera lo más normal del mundo. Como si Gregorio Ordóñez no hubiera podido ser alcalde de San Sebastián porque la gente no echó su papeleta en la urna. Como si no hubiera habido carniceros de cerdo y de Ternera picando el tuétano del miedo en la frialdad de los pisos francos: a ver si ahora vamos a pagarles lo que les costaron aquellos antros donde se planificaba la muerte de los inocentes. Por cierto, de las tumbas donde descansan los asesinados no ha dicho nada doña Reyes, la casera de los asesinos que quiere ponerles un piso. Como si fueran sus amantes.