Con permiso
Bartolo y su lucha contra la pobreza energética
«Culpar a los predecesores es una salida fácil y mediocre». Merkel ‘dixit’
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Iniciar sesiónHace un calor sofocante. Asfixiante. Me faltan calificativos con los que describir la sensación térmica que sufrimos desde hace días. Unos más que otros, eso sí. Pero lo realmente cierto es que las altas temperaturas no solo van a seguir aumentando en las próximas semanas, ... es que vamos a tener que seguir combatiéndolas como sea. Sobre todo, tirando de bolsillo. Pagando más luz. No queda otra. Una luz, por cierto, que no deja de batir récords históricos en su precio un día sí y otro también, lo que provoca más sofocones térmicos si cabe. Y es que el precio medio de la energía en el mercado mayorista toca hoy un nuevo máximo histórico por cuarto día consecutivo, a razón de 115,83 euros el megavatio hora, triplicando el registrado hace justo un año. Hoy más que ayer pero menos que mañana. Y así seguirá hasta que la intensa ola de calor que asola nuestro país nos dé una tregua o alguien (¿el Gobierno? no sé, pregunto) tome cartas en el asunto y no esté tumbado literalmente a la bartola en Lanzarote, por ejemplo.
El caso es que, al parecer, no se puede hacer nada de nada ahora porque la culpa no es del Gobierno actual, que lleva ya tres años en el poder. No. La culpa de los desorbitados precios, explica la ministra de Hacienda, María Jesús Montero -que sabe muchísimo de todo lo que rodea al sistema energético español y por eso ¡NO es la titular de la cuestión!-, es... ¡del PP, de Rajoy y de Aznar! Pues... querida Chiqui, olvida usted que el país hoy está bajo el mandato de los chicos, chicas y chiques de la coalición PSOE-Podemos, únicos luchadores contra la pobreza energética. Y sufre un lapsus memorístico enorme porque entre ambos presidentes populares gobernó durante siete años y pico el ¿socialista? Zapatero. Además de olvidar, me temo, que el 65% de la factura de la luz son impuestos (y eso sí, tocaya, está bajo su jurisdicción), por lo que lo mismo podría tener a bien recortarlos más, que margen tiene un rato. Además de que, de nuevo, desde Europa trasladan, aunque lo nieguen, que no solo no está prohibido intervenir sino que los Estados miembros pueden aplicar algunas salvaguardias, como intervenciones públicas en la fijación de precios para el suministro de electricidad a los clientes en situación de pobreza energética o vulnerables. ¿Entonces?
Por cierto, que alguien le explique a la ministra sabelotodo que la escalada seguirá y que los elevados precios del gas y los derechos de emisiones de dióxido de carbono son los que están tirando sin cesar del precio de la energía, que lo marca la más cara, que no es otra que su adorada «renovable».
Un consejo, ministra, y si eso trasládeselo al jefe: «Los presidentes no heredan problemas. Se supone que los conocen de antemano, por eso se hacen elegir para gobernar con el proposito de corregir dichos problemas. Culpar a los predecesores es una salida fácil y mediocre». Palabra de Merkel.
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