Reciclaje: Premiando la sostenibilidad

Para seguir contribuyendo a la mejora del medio ambiente surgieron los «Premios R»; puestos en marcha por Ecoembes el año pasado. Aunque la idea surgió antes, en 2012, tal y como cuenta Antonio Barrón, director de Comunicación Corporativa y Marketing de la organización. Por aquel entonces, tal y como indicaban las encuestas realizadas por Ecoembes, el 75% de los españoles aseguraba reciclar cada día en casa. Coyuntura que decidieron aprovechar desde la organización para empezar a dar forma a un plan destinado a reconocer el reciclaje, la innovación y la sostenibilidad.

Hoy, el 83,5% de los ciudadanos afirma separar casi todos sus envases. Tarea, a priori, sencilla gracias a las campañas de comunicación y sensibilización lideradas por Ecoembes –más de 300 en 2013-. Parece lógico arrojar las botellas de plástico, los aerosoles, las latas, los briks o las bandejas de aluminio, por ejemplo, al iglú amarillo. No debería serlo tirar al de color azul el papel y el cartón sucio o plastificado, las servilletas, los sobres con ventanillas de plástico, las colillas o los cuadernos con espirales, que suelen ser los «impropios» más característicos dentro de estos grandes recipientes que abundan en las calles de las localidades españolas: hay 347.976 contenedores amarillos y 187.633 azules.

Los «Premios R» refuerzan y complementan, como explica Barrón, otras acciones dispuestas por Ecoembes para seguir fortaleciendo el fomento y la divulgación del reciclaje. «Cada año llegamos a 750.000 escolares en programas de educación ambiental», puntualiza el director de Comunicación Corporativa y Marketing de la organización, a la que se encuentran vinculados la presentadora Nuria Roca, el deportista Rudy Fernández y el aventurero Jesús Calleja en la actualidad.

El año pasado la respuesta fue «muy positiva», reconocía Óscar Martín, director general de Ecoembes, durante la entrega de los I «Premios R», que tuvo lugar en Madrid en junio. El propio Martín recalcó que la elección del jurado –del que él formaba parte- no fue «nada fácil» debido a la «muy alta» calidad de los participantes.

Las cinco categorías en liza recibieron un gran número de proyectos, por lo que es difícil destacar una sobre las otras. Sin embargo, Barrón se muestra especialmente contento con el gran interés mostrado por el sector empresarial. Las compañías, la mayoría de las veces, son reacias a presentar al público sus avances en investigación en ecodiseño por temor a que los usuarios consideren que se trata de una acción solo encaminada a mejorar la imagen corporativa. Barrón, en cambio, opina que las empresas deberían dar a conocer que invierten cuantiosos recursos en innovación; ya que insufla vigor a la labor de concienciar sobre cuán valioso y primordial es el reciclaje. Una lata de conserva o una caja de cereales, por si no se había dado cuenta frente al lineal del supermercado, pesan, ahora, en torno a un 10% menos que en 1999.

Aguas Fontvella y Lanjarón también han aligerado sus envases, consiguiendo, con ello, optimizar la logística y originar menos residuos. Motivo por el cual recibieron el premio a la «Mejor iniciativa empresarial» que otorgaron los «Premios R» en 2013. La botella de 1,5 litros y la garrafa de 6,25 litros de Font Vella, en concreto, se fabrican con un 25% de plástico reciclado. Y Lanjarón crea su garrafa de 6 litros con un 20% de plástico de origen vegetal. Los finalistas fueron Electrodomésticos Taurus y Germaine de Capuccini , primer y segundo, respectivamente.

Fijarse en la eficiencia de los procesos empresariales y en la necesidad de apostar por la I+D+i le valió a Laura Martín para hacerse, en la misma edición de los «Premios R», con el galardón al «Mejor trabajo periodístico». El reportaje «Packaging sostenible: cambiar por fuera para cambiar por dentro», publicado en la revista Compromiso Empresarial (número 43 correspondiente a noviembre-diciembre de 2012), mostraba ejemplos prácticos como los anteriores y daba voz a expertos y consumidores. Los finalistas fueron Lluís Amengual del Diario de Mallorca y Sandra Mir de Telecinco .

Los consumidores, en definitiva, integran ese núcleo de población al que se dirigen gran parte de las acciones implementadas por las entidades locales, como el programa de educación ambiental de la Junta de Andalucía «Recapacicla», dirigido a los estudiantes (de todos los niveles) y a la tercera edad con el fin de que prospere la recogida selectiva, la recuperación y el reciclaje de envases. La Junta recogió su distinción como «Mejor iniciativa de la Administración» en la primera edición de los Premios R. Y el Ayuntamiento de Tiana (Barcelona) y el de Fuenlabrada (Madrid) fueron primer y segundo finalista, respectivamente.

La Fundación Apai , que trabaja por la inserción socio-laboral de jóvenes con discapacidad intelectual, produce papel de manera artesanal y elabora otros productos artísticos a partir de este material. Con la suma que establecían las bases de los I «Premios R» para la categoría de «Mejor iniciativa social», la fundación podrá continuar con su empeño de divulgación sobre las bondades del reciclaje a través de su aula didáctica. Apama y el Centro Guadalinfo de Cambil fueron los finalistas.

Igual de estimable es la tecnología que en 2013 desarrollaba en una planta piloto el Centro Nacional de Investigaciones Metalúrgicas del CSIC para recuperar fibras de carbono procedentes de residuos de la industria aeronáutica. Su proceso, que posibilitaba que dichas fibras pudieran emplearse en la elaboración de nuevos materiales útiles en distintos sectores y no generaba residuos, dado que hasta los gases resultantes se transformaban en energía eléctrica mediante turbinas, fue distinguido como «Mejor proyecto de investigación e innovación». La Universidad Internacional de Cataluña y Soluciona Energía- Ciemat fueron los finalistas de la primera edición de los «Premios R», cuyo evento se organizó para que coincidiera con el Día Mundial del Medio Ambiente .