Cien canciones para encender la Caja Mágica

El tenis es un una disciplina llena de costumbres y liturgias pero que ha sabido adaptarse con celeridad a los nuevos tiempos. Para que un deporte sobreviva como espectáculo de masas necesita de una televisión que lo difunda, pero de alguien que convierta cada partido en una experiencia única.

Esto es lo que ocurre en la Caja Mágica , donde un equipo de quince personas se encarga de la puesta en escena de los partidos. En el circuito hay torneos como Roland Garros o Wimbledon que se mantienen fieles a la tradición y otros, como el US Open, donde los tenistas eligen con qué música hacer su entrada en pista.

Aunque en Madrid aún no se ha llegado a ese extremo, la imagen y el sonido juegan un papel primordial en la presentación de los partidos. Además de la capacidad de influir en el estado de ánimo de casi 10.000 personas, el equipo de sonido de la Caja Mágica tiene entre manos una lista de más de cien canciones. Hay cuatro seleccionadas para la entrada a pista de los jugadores, tres para el calentamiento y, el resto, para los distintos descansos.

Desde una cabina en la parte alta del estadio Manolo Santana, Mar Eguiluz supervisa desde la música de los intermedios hasta el sonido que sale del micrófono del juez de silla y el speaker.

En este estudio también llevan la realización de las pantallas gigantes. Controlan marcadores, anuncios publicitarios y otros vídeos temáticos, como ocurrirá hoy con el homenaje a Dinara Safina. «Para ella he escogido dos canciones muy especiales. Esto se trata de emocionar, de hacer vibrar al público... Jugamos un poco con todo eso», explica Eguiluz.