Madrid prevé construir 16.000 plazas de aparcamiento disuasorio cerca de la M-40

La delegada del área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Inés Sabanés , ha profundizado en el proyecto, adelantado ayer en la cadena Ser, de construir ocho aparcamientos disuasorios para paliar la congestión del tráfico . En principio serán 16.000 plazas, con 2.000 en cada espacio, en el entorno de la M-40 . Incluido en los presupuestos de 2016, y con la posibilidad de llegar a una capacidad de 50.000, la obra tendrá un coste de ejecución de 160 millones de euros . Se espera que las plazas de parking estén disponibles para la mitad de la Legislatura vigente.

La explicación ha sido a colación de la comisión municipal de Salud, Seguridad y Emergencias, donde se ha tratado el tema de los atascos en Madrid, entre otros asuntos. En ese sentido, tanto Sabanés como el concejal del ramo tratado han coincidido en destacar que la solución a este problema tiene que ver con «las frecuencias y los indicadores de aviso » para adecuar los efectivos.

Respecto a los párquines disuasorios, la concejala de Movilidad ha explicado que, aunque todavía está en fase de estudio para determinar ubicaciones concretas, sí se tiene claro que será en las principales entradas a la ciudad y conectados con el transporte colectivo. Igualmente, tampoco está decidido el coste del aparcamiento, con la única certeza de que «será asequible» para que los conductores lo utilicen. Además, Sabanés ha adelantado que su intención es que la acometida sea una colaboración entre las tres administraciones respobsables: Ayuntamiento, Fomento y Comunidad de Madrid, pues los problemas del tráfico «son tarea de todos».

En segundo término, y relacionado con esta medida, la edil de Ahora Madrid ha señalado que «la línea a seguir» es la conexión del carril Bus VAO con los intercambiadores , con la unión del de Moncloa como ejemplo. Así, para alcanzar el propósito de los aparcamientos disuasorios es necesaria una mayor intermodalidad del transporte».

El concejal de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, se ha referido al tema de los atascos como «un problema de salud» como parte importante entre todas sus circunstancias. Si bien tiene que ver con la coordinación entre los agentes y los niveles de frecuencia e intensidad, Barbero ha asegurado que «no podemos ser simplistas» en la valoración, ya que «siempre» habrá congestión del tráfico cuando, por ejemplo, las condiciones meteorológicas sean adversas.

Sobre la gestión del atasco de ayer, en comparación con el del pasado 5 de octubre, Barbero ha aseverado que «el aprendizaje se reflejó en que había un grupo operativo disponible que fue avisado». En cualquier caso, ha insistido en que, con la pretensión de «optimizar» los recursos disponibles, la solución «es que no la hay», porque esta es un compendio de varias soluciobes.