Qué juego de azar tiene más probabilidades de tocar: el Gordo, la Primitiva o los Euromillones

Sepa que los números no son muy halagüeños. En cuanto al sorteo de la Lotería de Navidad, de los 100.000 números que participan en el juego, tan solo resultarán premiados 14.272. Estas cifras nos dejan un 14% de posibilidades de ser ganadores de cualquier premio (incluyendo la pedrea ), según ya explicó Adolfo Quirós, presidente de la Real Sociedad Matemática Española, a ABC.

Es por eso que los números no acompañan demasiado al optimismo. «Pero tampoco en la Primitiva, en el Euromillón, ni en general en ninguna lotería», afirmó al respecto Miguel Ángel Morales, matemático y «bloggero» en Gaussianos. Todos estos sorteos, «si están bien diseñados, son desfavorables para el jugador». O, como recuerda el dicho: la casa siempre gana. De lo contrario, los casinos quebrarían o el Estado dejaría de celebrar sorteos de lotería (no solo reparte menos de lo que recauda, sino que además gana dinero con los impuestos que le pone a los premios).

Si, a pesar de todos los avisos, usted tiene un pálpito o es un optimista incorregible, le convendrá saber qué opciones tiene en cada juego. En la Primitiva, la probabilidad de tener los seis números es de una entre 13,9 millones. Si además queremos ganar el reintegro, las probabilidades bajan a una entre 139,8 millones.

Si hablamos del Euromillón , la probabilidad de que nos toque es de una entre 114,5 millones. En cuanto a la Lotería Nacional ordinaria, acertar el número y la serie nos deja con una probabilidad de uno entre 18 millones . Tampoco es fácil en la Quiniela: uno entre casi cinco millones. El juego de azar con más probabilidades es la ONCE, con una entre 100.000.

Cuando este año muy probablemente no le toque nada en la Lotería de Navidad (al menos, según indican los números), podrá volver a intentarlo en la segunda vuelta: la Lotería del Niño . Gracias a que este sorteo dedica más dinero a los reintegros, en este sorteo hay un 37% más de posibilidades de que toque algún premio, en comparación con la Lotería de Navidad, aunque sea para quedarnos como estábamos antes de comprarnos el billete.