Eneas, Macario y otros animales videntes que han vaticinado la Lotería de Navidad

Como ya hiciera el célebre pulpo Paul en la Eurocopa del año 2010, Eneas escogió entre diferentes números el afortunado. Para ello sus cuidadores le pusieron comida bajo distintos recipientes y el perro eligió el que escondía el número 81703.

Un año más tarde, Macario , un perro mestizo de solo dos años y de intenso color chocolate, rescatado en Estepona, fue seleccionado por la misma protectora para «predecir» los dígitos que se harían con el tan ansiado premio Gordo de la Lotería de Navidad. En este caso el número elegido fue el 91.968.

Esta forma de adivinación se ha popularizado enormemente en los últimos años y no solo en lo referente a la lotería.

Aunque empezara a predecir resultados deportivos allá por el 2008, no fue hasta dos años más tarde, durante el Campeonato Mundial de Fútbol de 2010, cuando consiguió una gran popularidad alrededor de todo el mundo. Se trata del pulpo Paul , un pequeño cefalópodo que adivinó qué selección de fútbol ganaría en varios de los eventos más importantes vividos en la Eurocopa de 2008 y el Mundial de 2010.

Extensamente utilizado por la selección de Alemania para todos sus partidos, rápidamente se convirtió en el referente predilecto de los animales oráculo . Murió en octubre del año 2010, con 12 de 14 predicciones correctas; un hecho que sólo tiene 0.6% de probabilidades de pasar al azar.

Fueron numerosos los animales videntes que siguieron al octópodo. Durante el Mundial en Brasil de 2014 comenzaron a proliferar nuevos animales que lucharon por ocupar el puesto de Paul, forma en la que se dieron a conocer Norman, un armadillo del zoo de Muenster, y la Tortuga Cabezona.

No han sido los únicos. El gato Aquiles, la lora Olivia, la elefanta Citta han sido solo algunos de los «profetas» que rápidamente alcanzaron la fama por sus aciertos y, a la misma velocidad, cayeron en el olvido por sus fallos.