Bildu rechaza pero no condena las pintadas de ETA en Echarri Aranaz

Bien es cierto que Bildu no utiliza nunca la palabra «condena» porque, según dicen, «condenar sólo pueden condenar los jueces». Pero ayer delimitó su rechazo en «la nueva situación política» sin tener unas palabras de recuerdo para la familia Ulayar que 34 años después del asesinato del cabeza de familia continúa viviendo la humillación y el desprecio de una parte de sus vecinos.

Así pues, se trata de un rechazo meramente político, estratégico , ni humano ni personal. Según Bakartxo Ruiz, «los objetivos de esta situación política son abordar la consecuencias del conflicto y superarlas y desde luego trabajar por la normalización política». Y en su opinión, «este tipo de actos no van en ese sentido, no tienen sentido y los rechazamos».

El pasado sábado por la noche, tras un concierto, un grupo de jóvenes se dedicó a pintar distintas calles de Echarri Aranaz. Una de estas pintadas que decía en euskera «Gora ETA y punto» se realizó en la casa donde vivió Jesús Ulayar, asesinado por ETA en 1979, y su familia.

El Ayuntamiento de Echarri, gobernado por Bildu, ya tiene el requerimiento enviado por la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, para que limpie estas pintadas , aunque hasta el momento, ha tenido que ser siempre el Gobierno de Navarra, gracias a un convenio firmado el año pasado con la Delegación del Gobierno, quien se encargue de la limpieza de las pintadas etarras en esta localidad.

No en vano, los asesinos de Jesús Ulayar, que ya disfrutan de libertad, fueron proclamados «Hijos Predilectos» de esta localidad navarra situada en el corazón de la Sakana, el bastión bildutarra en la Comunidad Foral.