Risga e inserción laboral copan 400 millones del plan contra la pobreza

Su presupuesto, que dobla con creces el manejado en el período anterior, estará centrado en la Risga (Renta de integración social de Galicia) y los programas de contratación de personas en riesgo de exclusión. Ambas partidas coparán unos 400 millones. La segunda se incrementa exponencialmente, pues de los cinco millones destinados este año se pasará a los 70 durante este período, diez para 2015.

Además, las ayudas de inclusión social se llevarán 31 millones, 15 las acciones específicas y 19 los programas realizados por las entidades de este campo. En todo caso, no se trata de un presupuesto cerrado, sino que podrá ampliarse si las condiciones financieras así lo permiten. Pero más allá de la partida económica, la estrategia se fundamenta en medidas concretas.

De entre las aportadas por los agentes sociales destaca, tal y como ha explicado Feijóo, la potenciación de la formación dual para adaptarla a las necesidades de contratación de los diferentes sectores, el refuerzo a las familias monoparentales y la habilitación de viviendas autonómicas como casas de carácter asistencial o « alojamiento transitorio» para poner en marcha programas orientados a personas sin vivienda. A mayores, el plan también se fija en la situación de dos colectivos en concreto: el gitano — para el que existe una estrategia particular que se incorporará a esta— y el emigrante. Los gallegos retornados en situación de «especial vulnerabilidad» recibirán «ayudas extraordinarias», resaltó el titular autonómico.

A estas medidas se unen algunas ya conocidas como el acondicionamiento de comedores sociales o albergues, la posibilidad de anticipar el pago de las ayudas —sin necesidad de justificación— en los casos donde haya menores de por medio o la creación de una bolsa de horas destinada a realizar actividades de mediación con inmigrantes o minorías étnicas.

En el plano económico, el Consello también decidió revisar a la baja la orden anual que regula el sistema de precios medios de los inmuebles urbanos. A partir del 1 de enero, el valor de mercado de estas viviendas será un 12% inferior , una reducción que, sumada a las anteriores, alcanza el 34% y beneficia a las ventas, transmisiones, donaciones y sucesiones. «Hoy anunciamos una nueva bajada de impuestos para incentivar el mercado de la vivienda», ha remarcado Feijóo.