El nuncio apoyará a las víctimas de Oia, que serán acusación particular

Las familias han iniciado gestiones para contratar abogados y están a la espera de recibir tratamiento psicológico después de lo ocurrido. Muchas de ellas siguen lejos de sus hijos o nietos a pesar de que en las últimas horas varios fieles de Miguel Rosendo —el líder del grupo apartado por la Iglesia y ahora acusado por la Justicia— han dejado la casa de San Lorenzo del Escorial , en Madrid, una de las sedes desde la que estarían intentando reavivar el grupo con el nombre de La Voz de Serviam después de que la diócesis de Tui-Vigo interviniera el pasado marzo Orden y Mandato de San Miguel Arcángel al comprobar irregularidades.

Estos abandonos son interpretados por ellos como una «estrategia», pues aseguran que en realidad se han trasladado a otras casas aportadas por tres o cuatro sacerdotes que estarían apoyando a los «miguelianos» y contra los que la jerarquía eclesiástica ya habría actuado, según informa Ep.

Los afectados se reunirán en breve con el obispo tudense, Luis Quinteiro, a quien pedirán que medie con sus familiares para poder acercarse a ellos e intentar reorientar su vocación religiosa «dentro de la ley y del amparo de la Iglesia». No obstante, también piensan en conceder a sus hijas «un poco de libertad» para que reflexionen después de lo sucedido. El progenitor de Marta Paz, seguidora de Rosendo en libertad con cargos por presunta asociación ilícita , desveló que a la salida de los juzgados su hija le besó tanto a él como a su mujer y les comentó que necesitaba tiempo para «meditar», lo que interpreta como una posibilidad de que termine regresando a casa. Para quienes quieran contactar con ellos, facilitan la dirección afectadosomsma@yahoo.es.