La alcaldesa de A Bola deja el BNG y estudiará ahora su futuro político

La salida de Barge y sus concejales se debe, según explicó ayer, a que «ya no es lo mismo». Se refiere a la ausencia de «un liderazgo y criterios claros» en contraposición al modelo organizativo liderado por el exvicepresidente de la Xunta Anxo Quintana.

La regidora es una de los cargos institucionales críticos que se agrupan en la Irmandade Municipal Nacionalista e Galeguista, que cuestionan la deriva del Bloque y que trabajan por una vuelta del exportavoz de Allariz. La presencia de Barge, y sus intervenciones en el foro municipalista, se suman a la corriente de alcaldes que recelan de la posición soberanista del BNG y que secundan la «vía gallega» que propone el exportavoz del Bloque.

Sin embargo, tras su marcha hay quien observa movimientos del presidente del PP de Orense,Manuel Baltar. Sin ir más lejos, el portavoz del BNG, Xavier Vence, señaló ayer que «el señor Baltar está haciendo operaciones de fichaje de alcaldes, como el de Os Blancos, o el exalcalde de A Mezquita» y calificó a la provincia orensana como «un reino independiente donde la Diputación constituye la pieza clave que mueve los hilos».

La alcaldesa pareció indignarse con esta hipótesis y pidió «respeto» al líder del BNG por dudar de su independencia y vincular su salida con la intervención de Baltar. La propia regidora, en declaraciones a ABC, afirmó que «ahora mismo estamos centrados en comunicar la decisión a la organización» y matizó que «a partir de la semana que viene empezarán a estudiar qué hacer y cómo comparecer en las próximas elecciones». De hecho, la regidora realizó alguna confidencia a algún colega orensano en la que trataba de justificar su salida por la necesidad de mirar por su pueblo.

Mientras todo sucede, Baltar a lo suyo. Sin negar su intervención, recurrió a sus frases hechas para anunciar que el PP de Orense «quiere presentar candidaturas fuertes en todos los ayuntamientos». Algunos de esos consistorios recibieron, según confirmó ABC, la llamada de dirigentes populares de Orense para integrarse en las listas del partido hegemónico e invicto en la provincia del interior gallego. Según ha podido saber este periódico, los contactos con ayuntamientos como Vilar de Santos o Manzaneda no surtieron efecto y la oferta de Baltar no se transformó en un compromiso de los regidores con el PP orensano.

El baile de fichajes entre las fuerzas políticas de la provincia es una constante. En todos los partidos se produjeron salidas y el también presidente del PP de Orense las justifica aludiendo al carácter integrador y de vocación mayoritaria de los populares gallegos.

La dirección nacionalista observa el proceso desde la distancia. Vence sólo reprocha a los alcaldes críticos, como el caso de Monforte o Ribadeo, sus acusaciones a la organización y les recuerda que ellos fueron regidores presentándose con el BNG y que el proyecto nacionalista «se enraíza en las necesidades del país» .