La elección de Marzà eleva la tensión entre renovadores y dirección del Bloc

El revolcón a Morera ha sido público porque dio el nombre de Jiménez en la jornada del viernes, empeñando su liderazgo en este envite perdido. La situación entre el sector renovador del Bloc y la dirección que encabeza Morera se ha ido deteriorando pero la balanza se ha ido decantando en favor de los jóvenes frente a la vieja guardia.

La situación se repite como ya ocurrió en el proceso de primarias donde los representantes del sector renovador se impusieron a los designados por el «aparato». El propio Marzà ganó en Castellón a la candidata de Morera , Mónica Álvaro.

En Valencia fueron Fran Ferri y Maria Josep Ortega , también del sector crítico del Bloc, quienes se impusieron a Jordi Jua n, Teresa García y Cristina Suñer , preferidas por Morera.

También perdió en Alicante el pulso, en esta ocasión por la representante de Iniciativa, Mireia Mollà , quien se impuso a Rafael Climent . Precisamente este «derrotado» ha sido el único que Morera ha podido colocar en el nuevo Consell como titular de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo.

Las otras tres designaciones han corrido a cargo de los renovadores del Bloc, más próximos a Mónica Oltra dentro de la coalición. El gran reto de Compromís en los próximos meses tiene una doble vía.

La primera es ver cómo digiere el núcleo duro del Bloc su falta de preeminencia en los pactos y conformación de Consell porque entienden que pese a su menor representación en la coalición «se le ha dejado demasiada manga ancha a Iniciativa».

Fran Ferri sería la baza de los renovadores como sucesor de Morera al frente del Bloc. Ferri ha hecho de enlace en ocasiones con Morera y sería la persona de «consenso» para relevar a Morera que parece que se centrará más en la Presidencia de las Cortes.

La segunda vía de conflicto está por llegar pero la colaboración de Oltra y Podemos se mira con recelo con vista a las elecciones generales.