Jordi Martí deja la ejecutiva del PSC en disconformidad con la línea oficial

El paso dado por Martí supone un elemento más de presión sobre el sector catalanista del PSC, un 13% del partido que en el último Consejo Nacional fue barrido por el oficialismo . Figuras como la ex consejera Marina Geli o el alcalde de Lleida, Àngel Ros (éste último participó el pasado domingo en el mitin federalista en Barcelona donde intervino Rubalcaba), deben decidir aún el sentido de su voto en el pleno del Parlament que en dos semanas aprobará la remisión al Congreso de la petición de consulta, algo que el PSC rechaza. Deberán decidir también si optan por seguir en la ejecutiva y plegarse de manera definitiva a la línea oficial, o salir de la Ejecutiva siguiendo el ejemplo de Martí, lo que definitivamente abocaría el partido a una fractura.

La poca sintonía entre Martí y Navarro, y entre Martí y la Federación de Barcelona del PSC que sigue liderando el senador Carles Martí (a quien también ha comunicado hoy la noticia), pone aún más dificultades al jefe de filas municipal en sus opciones para las primarias. La fría reacción de Pere Navarro y de Carles Martí a la decisión de Jordi Martí no auguran precisamente una alfombra roja para quien siendo jefe de filas del PSC en el Ayuntamiento se ha puesto al frente del sector catalanista con su decisión de dejar la ejecutiva.