El Gobierno canario no dice cuánto cuesta su campaña antipetróleo

El representante del PP insistió sobre el objeto de su interpelación: saber el coste de las acciones con que el Gobierno que preside Paulino Rivero se ha opuesto y opone a la búsqueda de hidrocarburos frente a las costas de Lanzarote y Fuerteventura (a alrededor de 60 kilómetros). «El dinero de todos los canarios que ustedes han utilizado. ¿Cuánto ha costado? No me venga con valoraciones», dijo un vehemente Manuel Fernández, que preguntó al consejero por el gasto en los viajes de Rivero a Marruecos, Bélgica y Madrid para, entre otras cosas, «internacionalizar» la campaña, por el gasto en vídeos y anuncios «alarmistas», por el desembolso para un programa especial en la televisión pública de las Islas en el que, a su juicio, se «manipuló» la información, por el coste, en definitiva, de una campaña que los populares juzgan «política», no institucional. «Los gobiernos serios hacen campañas institucionales, nunca políticas y nada objetivas para acabar con otro dirigente», espetó el diputado popular en clara alusión al ministro de Industria, Energía y Turismo, su correligionario José Manuel Soria.

El alegato de Fernández solo sirvió, sin embargo, para que el responsable de las áreas de Economía, Hacienda y Seguridad revelase un par de datos: que la publicidad antipetróleo ha costado 30.000 euros y que la estrategia judicial la han llevado a cabo los servicios jurídicos del Ejecutivo de la región (no puntualizó, en cualquier caso, a cuánto ascienden las costas por los varios reveses que han tenido en los tribunales). De modo que el consejero nacionalista (Coalición Canaria) echó balones fuera y pasó a cuestionar campañas de publicidad estatales (como la del FROB, que considera excesiva y que fue, aseguró, de tres millones de euros) y a censurar acciones del gabinete de Mariano Rajoy: «Me gustaría que tuviera en cuenta el coste cuando se plantea una rebaja tributaria de cinco puntos para las petroleras». Con todo, González sí garantizó que su gobierno gastará «lo necesario» a fin de evitarle a la sociedad del Archipiélago la posible factura, «infinitamente mayor», de un vertido.

Durante el intercambio de opiniones hubo también tiempo para que el diputado del PP sacase a colación los ataques que se han perpetrado contra sedes de la fuerza política, unos ataques en los que subyace, argumentó, la susodicha campaña anti-Repsol que encabeza Rivero . Las últimas de estas acciones violentas tuvieron lugar días atrás contra sedes del partido en Lanzarote y Fuerteventura. Fue el local de la capital lanzaroteña, Arrecife, el que sufrió los mayores desperfectos. Cabe puntualizar que Coalición ya había condenado estos hechos por medio de un comunicado y que el consejero se reafirmó este martes en la reprobación.