El fiscal mantiene la petición de seis años de cárcel para Munar

Al inicio del juicio, el Ministerio Público pedía seis años de cárcel para la expresidenta del Consejo y de Unión Mallorquina (UM), Maria Antònia Munar , y para tres antiguos miembros de su gobierno, Miquel Nadal, Bartomeu Vicens y Miquel Àngel Flaquer , por fraude a la Administración y revelación de secretos. Además, solicitaba entre ocho y diez años de inhabilitación para cargo público por prevaricación. Los otros dos acusados eran el propietario de Sacresa, Román Sanahuja, para quien se pedían dos años de cárcel, y el abogado Santiago Fiol, para quien se solicitaba un año y medio.

Una vez escuchados todos los testimonios, la Fiscalía ha decidido mantener la pena solicitada para Munar , de seis años, mientras que la ha rebajado en el caso de los otros tres expolíticos de UM. Así, ahora se piden cuatro años de cárcel para Nadal, un año para Flaquer y ocho meses para Vicens. En cuanto a Sanahuja, los fiscales sólo piden ahora un año de prisión para él, mientras que mantienen sin cambios su solicitud para Fiol. Por su parte, el abogado de Munar, José Antonio Choclán, ha pedido la libre absolución de su cliente.

Sospechas de información privilegiada

Los hechos investigados en este caso se remontan a 2006, cuando la institución insular decidió vender Can Domenge a la UTE conformada por Sacresa y Ferrà Tur, que ofrecía 30 millones de euros, en lugar de decantarse por otras ofertas supuestamente mejores, entre ellas la que presentó Núñez y Navarro, que hubiera pagado 60 millones. Los peritos de la defensa consideraron ayer razonable el precio final de adjudicación, si bien los arquitectos que también prestaron declaración señalaron que el valor real de los terrenos se encontraría, por contra, en torno a los 59 millones. Estos últimos expertos coincidieron en afirmar, por otra parte, que los 15 días iniciales que dio el Consejo de Mallorca para presentar las distintas ofertas hacía «imposible» que se pudiera entregar un proyecto en condiciones en aquel momento.

Precisamente, la Fiscalía había venido sospechando desde el principio que Sacresa habría dispuesto de información privilegiada antes de la convocatoria del concurso público que permitió la enajenación de dichos terrenos, lo que habría facilitado que la oferta que presentó esta compañía se ajustase perfectamente a los requisitos exigidos por la institución insular.

Hace dos semanas, el exvicepresidente del Consejo, Miquel Nadal, entregó un escrito en la Audiencia en el que señalaba que Sacresa habría inspirado las bases del concurso público con la connivencia del propio Nadal y del exconsejero Vicens . De este modo, esta empresa habría pretendido garantizarse la adjudicación de Can Domenge, que sin embargo sólo se habría asegurado con posterioridad, después de aceptar pagar un soborno de cuatro millones de euros. Este último punto fue confirmado ante el juez por el propietario de Sacresa, Román Sanahuja.

Munar niega las comisiones

En su posterior declaración ante el tribunal, Nadal anunció que sobre este presunto cohecho declararía voluntariamente en el Juzgado pertinente. En cualquier caso, el expolítico reconoció que una parte del dinero negro recibido habría sido destinada a su campaña electoral como candidato a la Alcaldía de Palma en 2007, cargo que finalmente no consiguió, aunque sí fue teniente de alcalde durante varios meses con la socialista Aina Calvo como primera edil.

El exconsejero Vicens fue más allá en su declaración , y afirmó que de los cuatro millones de soborno pactados con Sacresa, tanto Munar como Nadal, así como una tercera persona y él mismo, habrían recibido 450.000 euros, mientras que dos millones de euros habrían llegado a UM. En concreto, esta última cantidad habría sido entregada por Vicens a Munar en el propio Consejo de Mallorca. Los 200.000 euros restantes habrían sido para un empresario. Por su parte, Munar negó haber recibido comisiones, para ella o para su partido, o haber negociado con Sacresa la adjudicación.